Este martes por la tarde, la Policía de Paraguay capturó a Luis Estigarribia Alderete, uno de los testaferros del Clan Insfrán, una organización delictiva dedicada al narcotráfico y que es liderada por Miguel Ángel Insfrán y el uruguayo Sebastián Marset, según informó la Secretaría Nacional Antidrogas de aquel país.

Estigarribia, de 25 años, es ingeniero civil y se erigía como el principal administrador de varios proyectos inmobiliarios de gran valor, además de ser el pastor de una de las iglesias manejadas por el clan. La captura se dio en Yasy Kañy, un distrito ubicado al noreste de Paraguay. La Policía lo buscaba desde el pasado 22 de febrero del 2022.

Esta detención se da en el marco de la operación A Ultranza Py, que fue lanzada en febrero de 2022, cuando el uruguayo Marset ya había logrado el pasaporte uruguayo y escapado de la Justicia Internacional.

Raúl Rivero, coordinador de prensa de la Secretaría Nacional Antidrogas de Paraguay (Senad), dijo que Estigarribía manejaba un perfil “totalmente bajo” y que se había quedado “sin recursos”.

“Estigarribia quedó capturado porque ya no contaba con los recursos suficientes para emprender una escondida como la que hubiese presentado si los tuviera”, dijo Rivero a la radio Ñandutí.

El jerarca apuntó que “cada detención” es importante, ya que puede aportar información sobre el paradero de los cabecillas de la organización, el “Pastor” Insfrán y Marset, quienes se encuentran prófugos de la Justicia internacional, al ser catalogados como los autores intelectuales del asesinato del fiscal paraguayo Marcelo Pecci en Colombia.

El fiscal lideraba la operación “A Ultranza”, un operativo que es calificado como la mayor investigación contra el crimen organizado y el lavado de dinero en la historia de Paraguay.

Antes del asesinato del fiscal paraguayo, Marset se encontraba detenido en Dubái, cuando fue apresado por poseer un pasaporte paraguayo falso. El uruguayo pudo escapar de esa situación, luego de que el Ministerio del Interior y Cancillería dispusieran de los procedimientos que terminaron en que Marset recibiera un pasaporte uruguayo y pudiera salir de prisión.