ESTADOS UNIDOS
La Casa Blanca descartó que haya hablado con sus aliados europeos sobre su polémico comentario de que el presidente ruso “no puede permanecer en el poder” tras la invasión lanzada contra Ucrania.
La Casa Blanca descartó ayer martes que el presidente Joe Biden haya hablado con sus aliados europeos sobre su polémico comentario en el que dijo que el presidente ruso, Vladímir Putin, “no puede permanecer en el poder” tras la invasión lanzada contra Ucrania.
El asunto no se abordó durante la videollamada que sostuvo ayer martes Biden con el canciller alemán, Olaf Scholz, el presidente francés, Emmanuel Macron, el primer ministro italiano, Mario Draghi, y el primer ministro del Reino Unido, Boris Johnson, dijo la Casa Blanca.
“No ocurrió. He hablado antes con el presidente sobre esto y no lo trataron. Sin embargo, coincidieron sobre varios temas claves, incluido el suministro de armas a Ucrania y el incremento de costes y sanciones para Rusia”, explicó en rueda de prensa la directora de Comunicación de la Casa Blanca, Kate Bedingfield.
Durante un discurso la semana pasada en Polonia, el país vecino de Ucrania que más refugiados ha recibido por la invasión rusa, el presidente Biden declaró que Putin “no puede permanecer en el poder”.
La Casa Blanca matizó después que Biden no estaba pidiendo “un cambio de régimen” en Rusia.
Biden explicó el lunes, ya en Washington, que su comentario fue una opinión “personal” que expresaba la “indignación moral” por la invasión a Ucrania, pero “no estaba articulando un cambio en la política” de Estados Unidos respecto a Rusia.
La directora de Comunicación del Gobierno estadounidense justificó ayer martes que Biden vio en Polonia “de primera mano el dolor que Vladímir Putin ha infligido” a los refugiados, de modo que fue “una declaración personal”.
“Creo que las palabras del presidente fueron muy claras. Él habló de forma personal sobre la indignación moral que siente y que es compartida por la gente de todo el mundo. Esto no implica un cambio de política”, sostuvo Bedingfield.
En la videoconferencia de los aliados de ayer martes, Biden, Scholz, Macron, Draghi y Johnson hablaron sobre aumentar la presión contra Rusia, enviar más armas a Ucrania, ayudar a los refugiados y controlar el aumento de precios energéticos derivado del conflicto.
Se estima que 3,8 millones de ucranianos han tenido que salir de su país debido a la guerra. (EFE)