ALTA TENSIÓN
"EE.UU. intenta utilizar a Taiwán para contener a China, no deja de distorsionar, oscurecer y vaciar el principio de una sola China", remarca un comunicado de Cancillería china.
Poco después del aterrizaje en Taiwán de la presidenta de la Cámara de Representantes de Estados Unidos, Nancy Pelosi, el Ministerio de Relaciones Exteriores de China emitió un comunicado en el que se enfatiza que este paso "ha impactado severamente la base política de las relaciones sino-estadounidenses" y advierte que "los que juegan con fuego se acaban quemando"
"Esto es una seria violación al principio de una sola China y las estipulaciones de los tres Comunicados Conjuntos entre China y EE.UU.. Ha impactado severamente la base política de las relaciones sino-estadounidenses, infringido gravemente la soberanía y la integridad territorial de China, socavado seriamente la paz y la estabilidad del Estrecho de Taiwan, y enviado una señal muy equivocada a las fuerzas secesionistas por la 'independencia de Taiwan'", comienza destacando el texto oficial.
China "se opone resueltamente y condena categóricamente, y ha hecho serias gestiones y fuertes protestas ante EE.UU.", agrega en ese tono el comunicado oficial de este martes.
En ese sentido, el gigante asiático reclama la soberanía sobre la isla y considera a Taiwán una provincia rebelde desde que los nacionalistas del Kuomintang se replegaron allí en 1949, tras perder la guerra civil contra los comunistas.
China ha resaltado que "en el mundo existe una sola China, Taiwán forma parte inalienable del territorio chino, y el Gobierno de la República Popular China es el único Gobierno legítimo que representa a toda China".
El Gobierno encabezado por Xi Jinping señala que "esto ha sido claramente reconocido por la Resolución 2758 de 1971 de la Asamblea General de las Naciones Unidas". Además, se plantea que "a partir de la fundación de la República Popular China en 1949, 181 países han establecido relaciones diplomáticas con China sobre la base del principio de una sola China".
El Gobierno de la potencia asiática se remitió a un compromiso de hace unos 40 años, en 1979. Ese año, asegura la Cancillería, Estados Unidos hizo un "claro compromiso" en el Comunicado Conjunto entre China y EE.UU. sobre el Establecimiento de Relaciones Diplomáticas.
"Los Estados Unidos de América reconocen al Gobierno de la República Popular China como el único Gobierno legítimo de China. Dentro de este contexto, el pueblo de los Estados Unidos de América mantendrá relaciones culturales, comerciales y otras relaciones no oficiales con el pueblo de Taiwán", cita el comunicado.
Al respecto, puntualizan que "como parte del Gobierno de EE.UU., el Congreso de EE.UU. está inherentemente obligado a acatar estrictamente la política de una sola China del Gobierno de EE.UU., y abstenerse de tener cualquier intercambio oficial con la región Taiwán de China".
"China siempre se opone a la visita de los congresistas estadounidenses a la región Taiwán de China, y las autoridades ejecutivas de EE.UU. tienen la responsabilidad de impedir tal visita".
Sobre el caso puntual de Pelosi -presidenta de la Cámara de Representantes de EE.UU.- su visita a y actividades en Taiwán, "en cualquier forma o por cualquier razón, constituyen una grave provocación política por elevar los intercambios oficiales de EE.UU. con Taiwán".
"China no lo acepta en absoluto, y el pueblo chino no lo permite en absoluto", remarca el Gobierno del gigante asiático.
Dando un paso más, aseguran que "la cuestión de Taiwán es lo más importante, más esencial y más sensible de las relaciones entre China y EE.UU.".
Sobre la situación en el Estrecho de Taiwán "está enfrentando una nueva ronda de tensiones y severos desafíos, que se debe, en lo fundamental, a las repetidas conductas de las autoridades taiwanesas y EE.UU. por cambiar el status quo". Y apuntaron a las autoridades taiwanesas que "vienen pretendiendo procurar la independencia valiéndose de EE.UU.".
"EE.UU. intenta utilizar a Taiwán para contener a China, no deja de distorsionar, oscurecer y vaciar el principio de una sola China, intensifica sus contactos oficiales con Taiwán, y envalentona las actividades secesionistas en pos de la 'independencia de Taiwán'", lanzó el Gobierno chino en una declaración que fue difundida en varios idiomas por la portavoz del Ministerio de Relaciones Exteriores de China, Hua Chunying.
Declaración del Ministerio de Relaciones Exteriores de la República Popular Chinahttps://t.co/AGyKVUHgjs
— Hua Chunying ??? (@SpokespersonCHN) August 2, 2022
Y además, advierten al Gobierno de los Estados Unidos: "Estas conductas, como jugando con el fuego, son extremadamente peligrosas. Los que juegan con fuego se acaban quemando".
China insiste que la "firme voluntad de los más de 1.400 millones de chinos" es "hacer realidad la reunificación completa de la patria constituye la aspiración común y la responsabilidad sagrada de todas las hijas e hijos de la nación china".
"Ningún país, ninguna fuerza y ningún individuo debería desestimar la firme determinación, la fuerte voluntad y la gran capacidad del Gobierno y el pueblo chinos de salvaguardar la soberanía nacional y la integridad territorial y materializar la reunificación del país y la revitalización de la nación", manifestó Cancillería.
Tomando en cuenta la situación puntual del aterrizaje de Pelosi, China asegura que "tomará, sin duda alguna, todas las medidas necesarias para defender resueltamente su soberanía nacional e integridad territorial".
Pero además, insisten que "todas las consecuencias derivadas de esto han de ser soportadas por EE.UU. y las fuerzas secesionistas por la 'independencia de Taiwán'". "China y EE.UU. son dos grandes países. La forma correcta de tratarse entre sí sólo puede ser el respeto mutuo, la convivencia pacífica, la no-confrontación y la cooperación de ganancias compartidas", plantea el gobierno de Xi Jinping.
Y advierten, en el mismo tono, que "la cuestión de Taiwán es puramente un asunto interno de China, por lo que ningún otro país tiene el derecho a actuar como juez en esta cuestión".
Luego, insiste que Estados Unidos "debe" tanto "dejar de entrometerse en Taiwan e intervenir en los asuntos internos de China", así como "dejar de distorsionar, oscurecer y vaciar el principio de una sola China", entre otras acciones que consideran perjudiciales para sus intereses.
Por último, el Gobierno de Xi Jinping plantea que la administración de Joe Biden no debe "ir más lejos por el camino equivocado y peligroso".