Ciudades bajo agua en el noreste de Italia: inundaciones sin precedentes dejan al menos 13 muertos

La región afectada es la de Emilia-Romaña; los últimos cinco cuerpos fueron localizados en las proximidades de la ciudad de Rávena, en la costa Adriática.

Compartir esta noticia
Inundaciones en el norte de Italia, en la región de Emilia- Romaña
Inundaciones en el norte de Italia, en la región de Emilia- Romaña.
Foto: AFP

Al menos 13 personas murieron hasta ayer jueves por las inundaciones en la región italiana de Emilia-Romaña. Como sucede en este tipo de tragedias, lamentablemente la cifra aumentará con el correr de los días.

Los últimos cinco cuerpos fueron localizados en las proximidades de la ciudad de Rávena, en la costa Adriática, y corresponden a personas de edad avanzada que no pudieron abandonar sus viviendas antes de que el agua las dejará completamente inundadas.

Una veintena de ríos se salieron de sus cauces en las llanuras de Emilia-Romaña, donde viven 4,5 millones de personas, debido a las lluvias torrenciales que cayeron en la región en los últimos días, que también provocaron deslizamientos de tierra.

Las inundaciones han provocado más de 20.000 evacuados, así como enormes destrozos que han afectado a las líneas eléctricas, telefónicas y a la viabilidad en la zona.

La previsión meteorológica ha mejorado en las últimas horas, aunque podría volver a llover durante el fin de semana, y las escuelas de ciudades como Bolonia y Casalecchio abrirán aunque el estado de emergencia continúa declarado en toda la región.

Las inundaciones en Emilia Romaña han causado daños “por varios miles de millones de euros”, aseguró el presidente de esta región del noreste de Italia, Stefano Bonaccini, que calculó que en 36 horas ha caído la lluvia de seis meses.

Inundaciones en Emilia-Romaña, región ubicada en el norte de Italia
Inundaciones en Emilia-Romaña, región ubicada en el norte de Italia.
Foto: AFP

En las provincias de Forlí, Ravena, Cesena, Ravena hay localidades enteras bajo el agua, una situación que puede empeorar en próximas horas, ya que el nivel de casi todos los ríos sigue estando por encima del umbral de emergencia.

La alcaldesa de Rávena, Michele De Pascale, indicó ayer jueves que aunque los habitantes de ciertas localidades evacuadas podrían volver a sus casas, otros tendrían que partir por la amenaza de rotura de algunos diques de contención.

Asimismo, más de 5.000 explotaciones agrícolas se encuentran anegadas, con animales ahogados y decenas de miles de hectáreas bajo el agua, informó Coldiretti, la mayor asociación agrícola y ganadera de Italia.

El Gobierno, que ha convocado un Consejo de Ministros extraordinario el próximo martes, anunció que destinará 20 millones de euros, que sumarán a los 10 millones ya aprobados hace un par de semanas cuando la región sufrió otra inundación, para las primeras emergencias, además de suspender las obligaciones fiscales y las hipotecas durante un tiempo.

Las inundaciones provocaron la anulación del Gran Premio de Fórmula 1 que estaba previsto el domingo en Emilia-Romaña.

La cifra

20.000

Es la cantidad de evacuados hasta ayer en la región de Emilia-Romaña, donde viven 4,5 millones de personas.

¿Qué hacer?

Las graves inundaciones en Emilia Romaña muestran la necesidad de “revisar el modelo de gestión, de ordenación del territorio” porque se trata de un fenómeno ligado al cambio climático que se va a repetir “cada vez con mayor frecuencia”.

“En la memoria viva de nuestra región no se había registrado una situación como ésta desde el final de la Segunda Guerra Mundial: una precipitación tan importante de 200 mm y con puntos de 250 mm por metro cuadrado y en un territorio tan vasto. Nunca había ocurrido antes”, explica a EFE Paride Antolini, presidente de la Asociación de Geólogos de Emilia Romaña.

Ha sido “realmente excepcional”, aunque debido el cambio climático “tenemos que esperar eventos como este con una frecuencia no como antes, de unos 200 años”, sino mucho más a menudo.

“Está claro que tenemos que revisar todo nuestro modelo de gestión, de ordenación del territorio: hay que encontrar nuevas áreas de laminación, encaminar las aguas a ciertas zonas y encontrar espacios alrededor de los ríos donde enviar estas aguas de crecida sin que causen daños. Y esto es un problema en una zona tan densamente poblada”, explica.

“Habrá que cambiar la legislación para ajustar la planificación, el consumo de suelo, las intervenciones” y es “absolutamente necesario un plan tanto a nivel regional como nacional no solo para gestionar lo que sucede, sino para prevenir” las situaciones futuras, añade.

El geólogo destaca también la importancia del “discurso de las montañas”, donde es fundamental “mantener una fuerte forestación para que las lluvias puedan al menos frenar su paso, lo que es un problema en una zona tan densamente urbanizada”.

El geólogo Paride Antolini subrayó también la necesidad de “empezar inmediatamente con un sistema de educación de la población” porque se han visto “muchos comportamientos inadecuados”, que no han tenido en cuenta el peligro de la situación, a pesar de que las autoridades “alertaron de que la inundación iba a ser inminente”.

“Había una alerta meteorológica que llevaba varios días advirtiendo de las dificultades que efectivamente se registraron después. En esta ocasión había un pronóstico perfecto”, pero la educación de la población para estos eventos dejó mucho que desear, destacó el experto, que abogó por hacer “simulacros de aluviones” como ya se hace con los terremotos.

Con información de EFE y AFP

¿Encontraste un error?

Reportar

Temas relacionados

italia

Te puede interesar