ARGENTINA
En el caso Vialidad su condena “ya la tienen escrita y creo, a esta altura, hasta firmada”, aseguró la vicepresidenta argentina.
La vicepresidenta argentina Cristina Kirchner publicó ayer lunes un video con un duro ataque a la Corte Suprema de Justicia. La acusó de haber convertido al Poder Judicial en un “partido político protector del macrismo” y “perseguidor” de los dirigentes de otras fuerzas y la responsabilizó por la crisis económica: dijo que “será muy difícil mejorar las condiciones de vida” de los argentinos “con esta Corte y con este modo de funcionamiento del Poder Judicial”.
Cristina Kirchner responsabilizó a la Corte de las decisiones que los tribunales tomaron contra exfuncionarios kirchneristas acusados de corrupción y, específicamente, del avance del caso Vialidad, el único por el que ella está siendo juzgada.
Dijo que cuando el máximo tribunal rechazó sus planteos contra el avance del caso prejuzgó en su contra. Y afirmó: “Dio un aval anticipado para la condena que, tal como dije el 1° de diciembre de 2019 ante el Tribunal Oral, ya la tienen escrita y creo, a esta altura, hasta firmada”.
“De la Corte ejemplar a la Corte de los cuatro: breve crónica de la decadencia”, es el título del video, que dividido en dos partes de más de siete minutos cada una, subió Cristina Kirchner a sus redes sociales.
“Con tantos muertos en sus roperos, no les queda más remedio que hacer lo que les manden bajo pena de ejecución sumaria en titulares y noticieros”, dijo la expresidenta sobre los cuatro miembros del máximo tribunal.
La “Corte ejemplar” a la que alude Cristina Kirchner en su video es la que “construyó” Néstor Kirchner. En 2003, a pocos días de asumir, él tomó la decisión de terminar con la Corte de la “mayoría automática”, relata la vicepresidenta.
“Limitándose en sus propias facultades para proponer los candidatos, Néstor Kirchner construyó una Corte Suprema de Justicia que fue catalogada por propios y ajenos como una Corte ejemplar”, afirma.
Los jueces que conformaban entonces la Corte -de acuerdo con la vicepresidenta- “dictaron fallos memorables como el de la inconstitucionalidad de las leyes de obediencia debida y punto final, que ubicaron a la Argentina en el escalón más alto del podio de Derechos Humanos a nivel global”. En aquellos tiempos, sin embargo, Cristina no era tan elogiosa del tribunal. Les recriminaba a los jueces sus orígenes en la política y les exigía independencia de los “grandes poderes concentrados económicos”. Esa Corte que hoy elogia fue la que declaró la inconstitucionalidad de sus proyectos de “democratización de la Justicia”.
Ahora, la vicepresidenta exhorta a “todos los partidos políticos”, de “izquierda a derecha”, a “construir”, como hace casi 20 años, una Corte nueva.
La debacle, según ella, empezó en 2015, cuando la Corte se quedó con tres miembros. Mauricio Macri, cuando asumió, “en abierta y flagrante violación de la Constitución Nacional, firmó un decreto designando en comisión a Horacio Rosatti y Carlos Rosenkrantz como miembros de la Corte Suprema, quienes, a su vez, aceptaron ser designados de esa forma, violentando la misma Constitución que ellos debían respetar y hacer respetar a todos los ciudadanos”, afirma Cristina Kirchner. “Este episodio constituyó, sin lugar a dudas, un punto de inflexión en la historia del Poder Judicial argentino y la antesala del proceso de persecución política, judicial y mediática, que se desató en toda la región con ejes muy claros en Brasil, Argentina y Ecuador”, dice.
“Esa ‘nueva’ Corte -afirma-, no solo convalidó la persecución que aún continúa, sino que además se transformó en un lugar de permanentes intrigas palaciegas y disputas de poder por la presidencia del cuerpo y los recursos del Poder Judicial.”
Según Cristina Kirchner, la Corte coronó su decadencia con la última salida del tribunal. “Cuando renunció Helena Highton (sic), la única mujer de ese cuerpo, la Corte quedó reducida a tan sólo cuatro miembros y comenzaron a salir a la luz otros escándalos”, dice.
Esa Corte tenía “tantos muertos en sus roperos” que no les quedó “más remedio” que hacer lo que les mandaran “bajo pena de ejecución sumaria en titulares y noticieros”.
Entre esos “muertos” cita “el vaciamiento por cifras millonarias de la obra social del Poder Judicial, administrada por el médico personal y familiares de uno de los cuatro cortesanos” y “causas penales contra el nuevo presidente de la Corte (Rosatti) por enriquecimiento ilícito y otra vinculada a su pasado como intendente de la ciudad de Santa Fe, en la que recusó al juez que lo investigaba y sospechosamente logró apartarlo”.
Fue en esa situación de vulnerabilidad, según la vicepresidenta, que la Corte tomó decisiones como la de rechazar todos los planteos presentados por ella en el caso Vialidad, la única causa por la que Cristina Kirchner está siendo juzgada, y que -estiman los jueces del tribunal- a fin de año podría estar terminada, con una sentencia.
La vicepresidenta dice en su video que la Corte “falló exactamente como anticiparon esos medios”, rechazando todos sus planteos, y con un “prejuzgamiento explícito y descarado de los cuatro cortesanos”.
En el final de su video, tras responsabilizar al máximo tribunal por las penurias de los argentinos, la vicepresidenta propone una nueva reformulación de la Corte. En sus palabras, a “construir, como hizo Néstor Kirchner en el 2003, con apenas el 22% de los votos y en el marco de una crisis institucional sin precedentes en la historia contemporánea, una Corte de la que todos y todas podamos volver a sentir orgullo”.