ARGENTINA

Una pareja decidió meterse a las aguas de Santa Clara del Mar, en Argentina para, según relataron los testigos, tener allí sexo. Pero el hecho, ocurrido el lunes pasado, tomó relevancia porque para ingresar al mar sin inconvenientes, enterraron en la playa a una niña de dos años que se encontraba con ellos. Cuando fue rescatada por la policía, la menor, que era hija de la mujer, tenía signos de hambre e insolación.

Ayer, el medio marplatense 0223 dio a conocer el video del momento en que la policía detenía a uno de los integrantes de la pareja que había dejado a la niña enterrada hasta el cuello en la arena.

En el video se puede ver cómo cuatro agentes de la policía bonaerense aguardan en la playa la llegada de uno de los integrantes de la pareja. Luego lo interrogan brevemente, lo esposan y finalmente se lo llevan detenido.

"¿Qué mierda hice? Ustedes no saben quién soy", gritaba el hombre y se resistía mientras dos agentes lo llevaban por la fuerza desde la playa hasta la camioneta de la Policía. El público presente en el lugar aplaudía el accionar policial y uno de los presentes se atrevió a gritarle al detenido: "Caradura".

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Luego de este episodio, los dos integrantes de la pareja, ambos de 29 años, fueron trasladados a la seccional policial. Allí descubrieron que además llevaban consigo unas 200 pastillas de Rivotril, una botella de popper, marihuana y una pastilla de éxtasis.

A ambos se les inició una causa por violación a la ley 23737, de tenencia y tráfico de estupefacientes. Y se dispuso la intervención del servicio zonal de menores, que implementó una medida de abrigo para la niña.

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La mujer, identificada como Luciana Margarita Oyola Luyando y de nacionalidad peruana, fue liberada junto a su pareja Rodrigo Damián Pujolle por la policía local, mientras la niña permanece en guarda judicial a la espera de que la reciba un familiar directo.

Pese a que el subcomisario de Santa Clara del Mar, Nicolás Manno, sostuvo que encontraron a la menor "con una insolación y con hambre", la Justicia decidió liberar a los mayores que la tenían a cargo porque "no hubo abandono".

"Que una mamá entierre a su hija hasta el cuello no configura un delito, pero sí se lo considera resistirse a la autoridad y, por eso, fueron detenidas. Más allá de lo aberrante y reprochable, no se le puede imputar estos delitos a la madre", argumentó el fiscal a cargo del caso, Gastón de Marco.