Agencias EFE y AFP
Una jueza prohibió al expresidente de Estados Unidos Donald Trump (2017-2021) publicar en sus redes sociales las pruebas en su contra que ha recabado la fiscalía en la imputación por su intento de anular las elecciones de 2020 y haber instigado el asalto al Capitolio.
La magistrada Tanya Chutkan dio el visto bueno a la petición hecha por el fiscal especial Jack Smith, quien solicitó una orden de confidencialidad después de que el republicano hiciera varias publicaciones en redes sociales sobre su proceso judicial.
“El acusado y sus abogados no divulgarán la evidencia a ninguna persona o entidad que no forme parte de su defensa o que no sean posibles testigos”, escribió la jueza en un documento judicial consultado ayer por EFE.
Chutkan subrayó que todo el material que la fiscalía proporcione durante el caso quedará sujeta bajo una “orden de protección” y el equipo de Trump solo lo podrá utilizar para preparar su defensa.
El fiscal especial había advertido el viernes a la jueza de una publicación en redes sociales de Trump en la que el republicano amenazaba: “Si ustedes van por mí,yo iré por ustedes!”
Para Smith, esto demuestra que existe la posibilidad de que el exmandatario “comience a publicar detalles” en redes sociales del caso, dañando el proceso judicial y afectando la imparcialidad del jurado, que solo debe atender a las pruebas que se le presenten durante el juicio.
Por ello había pedido una orden de confidencialidad, algo común en otros juicios en el Distrito de Columbia, que permite al acusado consultar la evidencia en su contra para preparar su defensa pero previene “su difusión y uso inadecuado”.
“Tal restricción es particularmente importante en este caso porque el acusado ha emitido previamente declaraciones públicas en las redes sociales con respecto a testigos, jueces, abogados y otros”, argumentó.
Trump compareció el jueves ante el tribunal federal del Distrito de Columbia donde se declaró no culpable de los cuatro delitos que se le imputan por haber intentado revertir las elecciones de 2020 en las que perdió contra Joe Biden y haber instigado el asalto al Capitolio.
Es la tercera imputación penal contra el expresidente, acusado además en Nueva York por el soborno a la actriz porno Stormy Daniels y en Miami por haberse llevado ilegalmente documentos clasificados al dejar el poder.
Los procesos judiciales en su contra, sin embargo, no han mermado la popularidad de Trump, gran favorito en las primarias republicanas de cara a las elecciones de 2024, en las que aspira a batirse de nuevo con Biden.
Antecedentes
¿Hacer campaña para la Casa Blanca desde una celda? No sería la primera vez.¿Podría Donald Trump hacer campaña tras las rejas? Pese a tener varios casos judiciales pendientes esto sigue siendo una perspectiva muy incierta pero no una hipótesis disparatada.
En la historia de Estados Unidos, dos hombres ya lo han hecho. Se trata de Eugene V. Debs y Lyndon LaRouche.
Trump, quien compareció el jueves ante una jueza en Washington, ya ha advertido que aunque sea condenado seguirá con la campaña. De hecho, según los expertos, nada en la Constitución se lo impide.
Estas son las historias de dos pioneros: un líder sindical y un polemista de extrema derecha.
El primer caso fue el del “anticapitalista” Eugene V. Debs, nacido en 1855, en su época fue un político famoso que acaparó titulares. Y sigue siendo toda una personalidad para los activistas de izquierda estadounidenses.
El senador Bernie Sanders, uno de sus admiradores hizo un documental en 1979 sobre él que recorrió el país para defender los derechos de los trabajadores.
Eugene V. Debs fue cinco veces el candidato de los socialistas a las presidenciales. A las de 1920 se presentó desde una celda donde purgaba una condena a diez años de prisión por haber llamado en 1918 a oponer resistencia al reclutamiento obligatorio para la Primera Guerra Mundial.
“Me han acusado de hacer obstrucción a la guerra. Lo reconozco. Señores, odio la guerra”, dijo al jurado durante el juicio.
El “recluso número 9653” obtuvo más de 900.000 votos ese año. Le conmutaron la sentencia en 1921 y fue liberado. Murió cinco años después.
El segundo caso fue Lyndon LaRouche, quien se presentó ocho veces a las presidenciales. Participó en todas desde 1976 hasta 2004.
Este polemista de extrema derecha, nacido en 1922, comenzó su carrera política después de la Segunda Guerra Mundial en la extrema izquierda, antes de fundar el Partido de los Trabajadores Estadounidenses.
Posteriormente probó suerte como demócrata (para disgusto del partido) o independiente.
A lo largo de su vida su ideología evolucionó hacia las tesis de extrema derecha y se le acusó muchas veces de antisemitismo, lo que él negó. Fue escéptico sobre el calentamiento global y defendió muchas teorías de la conspiración, como por ejemplo que el político estadounidense Henry Kissinger era un “agente de influencia” de los soviéticos.
A finales de los 80 LaRouche fue sentenciado a 15 años de prisión por evasión de impuestos, lo cual no le impidió presentarse a las elecciones de 1992 desde la cárcel. Logró poco más de 26.000 votos en los comicios.
Un amigo cercano de Donald Trump, Roger Stone, lo calificó en el pasado de “buen hombre” y dijo que “conoce bien el pensamiento extraordinario y profético de Lyndon LaRouche”. Falleció en 2019 a los 96 años.
Los cargos y posibles penas contra Trump
El expresidente Donald Trump está acusado de cuatro cargos: conspiración para defraudar a EE.UU., conspiración para obstruir un procedimiento oficial, obstrucción e intento de obstruir un procedimiento oficial y conspiración contra derechos.
Por el primero de esos cargos le podría caer una pena máxima de cinco años de cárcel, por el segundo y el tercero veinte años de prisión, respectivamente, y por el cuarto, diez años, según datos oficiales.