AFP / EFE
Dos personas fueron detenidas por hacer un agujero con una excavadora en la Gran Muralla china, con el objetivo de crear un atajo y reducir el tiempo de sus trayectos, informó la cadena estatal CCTV.

Los sospechosos, identificados por sus apellidos, Zheng y Wang, son dos trabajadores de la construcción que, según la investigación policial, usaron una excavadora para abrir un gran hueco en una de las secciones de la muralla en la provincia central de Shanxi (en el noreste del país) con el fin de facilitar el paso de su maquinaria.

La policía recibió una denuncia sobre el hecho y se trasladó al lugar, donde encontró evidencias de que el muro había sido destruido por una máquina pesada. Los agentes les siguieron la pista y localizaron a los dos sospechosos en una localidad vecina. Durante su interrogación, confesaron haber dañado la estructura "para evitar tener que dar un rodeo".

La muralla fue construida por los emperadores chinos para prevenir la incursión de invasores extranjeros en el siglo III a. C. y se prolongó durante cientos de años. En total, se extiende a lo largo de miles de kilómetros.

El incidente ocurrió el pasado 24 de agosto en el tramo llamado "32", que debe su nombre a su condición de ser el 32º puesto de vigilancia que se encuentra en el territorio del condado de Youyu. Esta sección forma parte de la Gran Muralla construida durante la dinastía Ming (1368-1644) y está situada a unas seis horas en auto al oeste del centro de Pekín.

La cadena estatal CCTV señaló que los sospechosos habían causado "daños irreversibles" en la muralla de la época Ming, que fue descrita como un pasaje "relativamente intacto" de gran valor para la investigación.