Ecuador se convirtió ayer en el cuarto país de Latinoamérica en suscribir un acuerdo comercial con China, que desde el año pasado desplazó a Estados Unidos como su principal socio comercial no petrolero. Luego de una negociación que tomó diez meses, el país andino se sumó así a Chile, Perú y Costa Rica, las otras tres naciones que ya tenían un tratado de libre comercio con el gigante asiático.
Con este acuerdo, Ecuador espera catapultar el intercambio comercial con la primera economía del mundo en número de consumidores después de que el comercio bilateral entre ambos países haya aumentado en los últimos años hasta alcanzar en 2022 los 12.295 millones de dólares. Mientras las exportaciones ecuatorianas a China llegaron en 2022 a 5.843 millones de dólares, las ventas chinas a Ecuador supusieron 6.452 millones de dólares.
El documento fue suscrito por el ministro de Producción, Comercio Exterior, Inversiones y Pesca de Ecuador, Julio José Prado, y por el ministro de Comercio de China, Wang Wentao, en una ceremonia celebrada simultáneamente en Quito y en Pekín a través de una videoconferencia.
“Este es el acuerdo comercial más importante de Ecuador y va a cambiar la forma en la que se produce en Ecuador”, aventuró Prado, que destacó el “tiempo récord” de la negociación. En ese acto, el ministro ecuatoriano explicó que el acuerdo se limita solo al comercio de bienes y no contempla inversiones o servicios.
Liberación paulatina
El tratado permitirá liberar de aranceles para el ingreso a China de manera inmediata al 50% de la oferta exportable de Ecuador, lo que llegará al 99,6% en el transcurso de diez años, ya que habrá desgravaciones paulatinas en otros productos.
Entre los productos que exporta Ecuador, el atún y la sardina tendrán una desgravación inmediata para su ingreso al mercado chino, mientras que las rosas y cacao alcanzarán ese rango en cinco años, y el camarón y el banano en un plazo de diez años.
Asimismo, el acuerdo excluye 828 productos ecuatorianos que han sido catalogados altamente sensibles para proteger sectores de manufacturas, agricultura e incluso algunas industrias, en partidas como cerámica plana, tableros de madera, algunos textiles y alambre de hierro.
El acuerdo comercial con China era uno de los grandes hitos que el presidente de Ecuador, el conservador Guillermo Lasso, se había marcado cuando llegó hace dos años al poder, como parte de su estrategia para liberar el comercio de Ecuador con el mundo.
Con información de EFE