ESTIMAN REVOLUCIÓN
Este paso podría permitir a la humanidad romper su dependencia de los combustibles fósiles que provocan la crisis climática global.
Estados Unidos anunció este martes un avance científico histórico en el campo de la fusión nuclear, que en unas décadas podría revolucionar la producción de energía en la Tierra.
Los científicos llevan décadas trabajando para desarrollar la fusión nuclear, considerada una fuente de energía limpia, abundante y segura que podría permitir a la humanidad romper su dependencia de los combustibles fósiles que provocan la crisis climática global.
Un experimento llevado a cabo la semana pasada "produjo más energía de fusión que la energía láser utilizada" para provocar la reacción, explicó en un comunicado el Laboratorio Nacional Lawrence Livermore (LLNL), situado en California y dependiente del Departamento de Energía estadounidense.
Este hallazgo se verá "en los libros de historia", declaró en rueda de prensa la secretaria de Energía estadounidense, Jennifer Granholm.
El anuncio, que se filtró a la prensa hace unos días, entusiasmó a la comunidad científica en todo el mundo.
Las centrales nucleares utilizan actualmente la fisión, la división del núcleo de un átomo pesado para producir energía. La fusión nuclear, al contrario, combina dos átomos de hidrógeno para formar un átomo de helio más pesado, liberando una gran cantidad de energía en el proceso.
Esto ocurre dentro de las estrellas, incluido el Sol. En la Tierra, este proceso se puede conseguir con la ayuda de láseres ultrapotentes.
En el National Ignition Facility (NIF), que depende del laboratorio californiano, 192 láseres apuntan a un cilindro del tamaño de un dedal, donde se colocan los átomos de hidrógeno ligero que se fusionarán.
Los científicos produjeron así unos 3,5 megajulios de energía usando 2,05 megajulios a través de los láseres, según el comunicado.
Largo camino
Este resultado proporciona una prueba de principios físicos descritos hace décadas.
La fusión tiene algunas ventajas: no presenta riesgo de desastre nuclear y produce menos desechos radiactivos. Y sobre todo, en comparación con las centrales eléctricas de carbón o gas, no genera gases de efecto invernadero.
Sin embargo, todavía queda un largo camino por recorrer antes de que la fusión sea viable a escala industrial y comercial.
Probablemente "décadas", declaró este martes Kim Budil, la directora del Laboratorio Nacional Lawrence Livermore. Los desafíos son tecnológicos, puesto que hay que poder repetir el experimento muchas veces por minuto, explicó.
Hay otros proyectos de fusión nuclear en el mundo, como el llamado ITER, que actualmente se está desarrollando en Francia.
En lugar de láseres, ITER utilizará una técnica conocida como confinamiento magnético: los átomos de hidrógeno se calientan en un inmenso reactor, donde permanecerán confinados con la ayuda de un campo magnético.
¿Qué es la fusión nuclear?
La fusión difiere de la fisión nuclear, la técnica utilizada actualmente en las centrales nucleares que consiste en romper las uniones de núcleos atómicos para liberar energía.
La fusión es el proceso inverso: implica fusionar dos núcleos livianos (de hidrógeno por ejemplo), para crear uno pesado (de helio), y eso también libera energía.
Es el proceso que se produce en estrellas como el Sol. "Controlar la fuente de energía de las estrellas es el mayor desafío tecnológico de la humanidad", escribió en Twitter el físico Arthur Turrell, autor del libro "The Star Builders".
La fusión solo es posible calentando materiales a temperaturas extremadamente altas, de más de 100 millones de grados celsius.
Al contrario que la fisión, la fusión no conlleva riesgos de accidente nuclear. Si hay algún fallo del sistema, la reacción simplemente se detiene, explica Erik Lefebvre, jefe de proyecto de la Comisión de Energía Atómica (CEA) de Francia.
Además, la fusión produce menos desechos radiactivos que los que generan las centrales actuales. Y no produce gases de efecto invernadero.
"Es una fuente de energía totalmente descarbonizada, que genera pocos residuos, y que es intrínsecamente muy segura" por lo que sería "una solución de futuro para los problemas energéticos a escala global", resume Lefebvre.
Debido a su estado de desarrollo, no representa una solución inmediata a la crisis climática y a la necesidad de transición rápida de energías fósiles.