AFP,EFE
La organización palestina terrorista Hamás no acudirá a la reunión para negociar el alto el fuego en Gaza con Israel programada para mañana martes, que iba a ser en El Cairo o en Doha, según anunció en un comunicado ayer, en el que llamó a implementar lo ya acordado con anterioridad “en lugar de proseguir con nuevas rondas de negociaciones”.
El grupo terrorista apela a los mediadores -Egipto, Catar y Estados Unidos- a hacer a Israel cumplir con lo acordado el pasado 2 de julio, sin que hayan trascendido más detalles al respecto, asegurando que las nuevas propuestas del Estado hebreo en las negociaciones “dan cobertura” a su ofensiva en Gaza y le “conceden tiempo” para continuarla.
La retirada de Hamás de cara a la ronda de negociaciones del martes llega, según la organización, a la luz del bombardeo israelí contra la escuela Al Tabaín de Ciudad de Gaza el sábado, en el que murieron al menos 93 palestinos y que calificó como una “masacre”, mientras que Israel afirma que esos ataques fueron contra terroristas. A este ataque se suma la muerte del líder político del grupo, Ismail Haniyeh, en un ataque en Teherán del que Israel no ha reivindicado ni desmentido su autoría -como suele ocurrir en los movimientos que afectan a Irán-.
“El movimiento aceptó la propuesta de los mediadores el 6 de mayo de 2024”, asegura el grupo palestino terrorista Hamás en el comunicado, en referencia a la anterior ronda de negociaciones, fallida, “y acogió con satisfacción el anuncio del presidente (de Estados Unidos, Joe) Biden el 31 de mayo de 2024, así como la Resolución 2735 del Consejo de Seguridad de las Naciones Unidas”, sobre la actual propuesta que está sobre la mesa.
Plan de Biden
En ese contexto, Hamás reclamó aplicar el plan de tregua en Gaza presentado por el presidente estadounidense Joe Biden, “en lugar de realizar más negociaciones”, en momentos en que los habitantes de Jan Yunis, en el sur del territorio palestino, huyen ante la inminencia de nuevos bombardeos israelíes.
Las negociaciones indirectas, mediadas por EE.UU., Egipto y Catar, no arrojaron ningún resultado hasta el momento. Israel aceptó el viernes reanudarlas a partir del 15 de agosto, en respuesta a un llamamiento de esos tres países.
Biden presentó el 31 de mayo un plan, que atribuyó a Israel, que consta de tres fases.
La primera prevé una tregua de seis semanas y una retirada israelí de las zonas densamente pobladas de Gaza, así como un canje de rehenes retenidos en el territorio palestino por presos palestinos detenidos en Israel. Luego se va avanzando hasta la liberación total. En su comunicado, Hamás “pide a los mediadores que presenten una hoja de ruta para implementar” ese plan, “basado en la visión de Biden y en las resoluciones del Consejo de Seguridad de la ONU”.
El grupo palestino terrorista Hamás, en el poder en la Franja de Gaza desde 2007, urge a los mediadores a “forzar al ocupante [israelí] a aplicar [ese plan], en lugar de llevar a cabo más negociaciones o presentar nuevas propuestas que sirvan de cobertura a la agresión de la ‘ocupación’”, insistió.
Netanyahu
El primer ministro israelí, Benjamín Netanyahu, desmintió ayer que su ofensiva en Gaza -donde se están dando evacuaciones masivas de civiles-, no tenga un rumbo claro e insistió en que su principal objetivo es “la victoria”, tras la publicación de un artículo en el medio Ynet en el que se cita la frustración de los altos mandos militares por no tener una hoja de ruta a seguir tras once meses de guerra en el enclave palestino.
“Escuché en los medios de comunicación que los combates en Gaza no tienen ningún objetivo y que las decisiones políticas no les dejan avanzar. No es cierto, el objetivo es la victoria. Nuestros soldados están destruyendo a Hamás de manera sistemática con el objetivo de demoler las capacidades militares y gubernamentales, además de liberar a los rehenes “, dijo a Ynet.
Soldados entrevistados por Ynet reconocieron que el Gobierno israelí no ha fijado un “objetivo a largo plazo” sobre la guerra en Gaza y que la situación actual es de “estancamiento”. “Estamos actuando de acuerdo con decisiones políticas. Hamás actúa como un sistema y estamos tratando de eliminarlo”, recoge el artículo.
Asimismo, la publicación señala que la creciente tensión en la frontera norte de Israel con el grupo libanés terrorista Hezbolá -disparada estas últimas semanas tras el ataque en Majdal Shams con 12 niños israelíes muertos y la posterior muerte de un dirigente de la milicia chií como respuesta- ha aumentado la necesidad de enviar más refuerzos militares a esta parte del país, lo que repercute en las filas que luchan en la Franja.
No es la primera vez que medios israelíes recogen el malestar de los soldados que combaten en Gaza, algunos de los cuales han reconocido mostrarse incapaces de “eliminar” a Hamás y de poder traer de vuelta a casa a los más de cien rehenes que continúan allí.
El cese de los combates es algo que también le piden los familiares de los rehenes y la comunidad internacional, que en está ejerciendo una renovada presión sobre Israel y Hamás para que lleguen a un acuerdo y, así, evitar que este escenario derive en una guerra regional.
Jordania: un posible “campo de batalla”
El rey jordano, Abdalá II, insistió ayer domingo en que no permitirá que su país se convierta en un “campo de batalla” ante un posible ataque de Irán contra Israel ni que “la vida de su pueblo corra peligro”, informaron fuentes oficiales.
El monarca hizo estas declaraciones en una reunión con una delegación de miembros del Congreso de Estados Unidos, que tuvo lugar en el palacio Al Huseiniya, ubicado en la capital jordana, donde se abordaron “los acontecimientos actuales en la región y las formas de fortalecer la asociación estratégica entre Jordania y Estados Unidos”, indicó la agencia oficial de noticias jordana, Petra.
Abdalá II subrayó la necesidad de hacer “los máximos esfuerzos para reducir la escalada en la región y alcanzar una calma para evitar caer en una guerra regional”, y añadió que Oriente Medio seguirá “siendo vulnerable a la expansión del conflicto que amenaza su estabilidad mientras continúe la guerra en Gaza”.
Además, el monarca reafirmó “la necesidad de encontrar un horizonte político para lograr una paz justa y global basada en la solución de dos Estados, como única forma de garantizar la seguridad de los palestinos, los israelíes y toda la región”.
Hace una semana, el Ejército de Jordania advirtió que “golpeará con mano de hierro” a quien amenace la seguridad nacional jordana.
El ministro de Exteriores de Jordania, Ayman al Safadi, viajó a Teherán la semana pasada, donde se reunió con su homólogo iraní, Ali Bagheri Kaní, en un intento de convencer a ese país para que no responda al asesinato del líder político de Hamás, Ismail Haniyeh, en la capital iraní el pasado 31 de julio, atribuido a Israel.
Irán ya lanzó un ataque directo e inédito contra el territorio israelí a mediados de abril pasado en represalia por el bombardeo contra el consulado iraní en Damasco el día 1 de ese mes, que causó la muerte de siete miembros de la Guardia Revolucionaria iraní, entre ellos dos generales.
En ese ataque, las defensas antiaéreas jordanas interceptaron en el espacio aéreo del reino “objetos voladores” que formaban parte del masivo ataque iraní del sábado contra Israel, en el que se emplearon cientos de drones y de misiles balísticos y de crucero.
Diversos países han manifestado su preocupación por una escalada regional de la guerra entre Israel y sus aliados extranjeros contra los terroristas, en especial Líbano, donde el conflicto ya se ha extendido. [EFE]
Acusados
Unos 26 manifestantes contra la guerra en Gaza, que en abril pasado bloquearon el tráfico del puente Golden Gate en San Francisco (California, EEUU), fueron acusados por cargos de conspiración y detención ilegal, dijo la fiscal de distrito de San Francisco, Brooke Jenkins. La Fiscalía anunció cargos por conspiración contra esos 26 manifestantes, que también enfrentan acusaciones de detención ilegal de una persona, allanamiento, reunión ilegal y desobediencia a un oficial uniformado, entre otros.
La protesta ocurrió el pasado 15 de abril y autoridades señalan que comprometió la seguridad pública.
“Poner fin a la guerra sería un paso decisivo”: Canciller alemán intenta evitar una escalada regional
El canciller alemán, Olaf Scholz, dijo ayer domingo al primer ministro israelí, Benjamin Netanyahu, que ha llegado la hora de poner fin a la espiral de violencia en Oriente Medio y procurar desescalar la situación en Medio Oriente. Según un comunicado de la cancillería alemana, Scholz, en una conversación telefónica, dijo a Netanyahu que tras haber logrado metas militares importantes en la lucha contra el grupo palestino terrorista Hamás, es el momento de lograr un acuerdo para la liberación de los rehenes y un cese de hostilidades.
“Se han alcanzado muchas metas en la lucha contra Hamás, las víctimas civiles son muchas y el dolor en la franja de Gaza es enorme. Poner fin a la guerra en Gaza sería un paso decisivo para frenar la escalada en la región”, dice el comunicado alemán.
Asimismo, Scholz reiteró su condena de las amenazas de Irán y de la milicia libanesa pro iraní Hezbolá, que han prometido represalias contra Israel por el asesinato de varios de sus líderes, en el caso del grupo libanés, y por el asesinato en su territorio del jefe del buró político de Hamás, Ismail Haniyeh, en el caso de Teherán, que acusó a Israel de haber perpetrado el ataque que mató al líder palestino.
Los ataques en represalia entre las partes se han multiplicado en los últimos días, lo que es una alerta internacional.