AFP y EFE
El príncipe de Gales, William, afirmó este viernes que su esposa, Kate, "está bien" tras su diagnóstico de un cáncer no especificado durante una visita realizada al hospital Comunidad de St Mary en las Islas Sorlingas.
El primogénito del rey Carlos III del Reino Unido, heredero al trono británico, también comentó que sus hijos, los príncipes Jorge, Carlota y Luis, se habían puesto "muy celosos" de esa visita a las islas situadas en el océano Atlántico, a unos 40 kilómetros de la costa de Cornualles (suroeste de Inglaterra) y dijo que igual los traería en otro momento del año.
Según señalaron medios locales, el príncipe recibió una carta de una matrona, escrita por la nieta de ésta, en la que la niña enviaba buenos deseos en su recuperación a Kate y al rey, quien, al igual que su nuera, también está recibiendo actualmente tratamiento oncológico por otro cáncer del que tampoco se han dado detalles.
Esta visita es la primera que realiza William a las citadas Islas desde que asumió el título de duque de Cornualles, que ostenta a la vez que el de príncipe de Gales.
El pasado marzo, Kate reveló que está recibiendo "quimioterapia preventiva" después de que se le detectara un cáncer tras haberse sometido a una cirugía abdominal en enero. La princesa aún no ha regresado a sus compromisos públicos.
El rey, por su parte, retomó la pasada semana su agenda pública tras el diagnóstico de cáncer el pasado febrero.
El rey Carlos III entregó una de sus funciones militares a su hijo
Carlos III entregó este lunes su título de coronel en jefe del Cuerpo Aéreo del Ejército británico a su hijo William, cargo honorífico que parecía prometido al hermano de éste, Harry, durante una visita a una base militar.
El monarca británico de 75 años acudió junto al heredero al trono al acto, al que asistieron militares y sus familias, en el aeródromo de Middle Wallop, Hampshire, en el sur de Inglaterra.
Carlos III se convirtió en el primer coronel en jefe del Army Air Corps británico hace 32 años y anunció en 2023 que quería transmitir este título a su heredero.
"Deseo expresarles mi gran alegría por estar con ustedes, aunque sea brevemente, una alegría acompañada también de una gran tristeza después de 32 años de estar con ustedes y admirar sus numerosos éxitos", declaró.
Su hijo pequeño, Harry, de 39 años, enfrentado a la familia real y autoexiliado en Estados Unidos, sirvió en este regimiento del ejército británico durante una misión en Afganistán en 2012, en la que fue comandante de un helicóptero Apache.
Debido a ello, se esperaba que heredara este título honorífico después de su padre, pero el duque de Sussex renunció a sus obligaciones reales en 2020 cuando abandonó el Reino Unido con su esposa Meghan.
Durante su estancia en Londres el pasado miércoles para asistir a una ceremonia con motivo del décimo aniversario de los Invictus Games, una competición internacional para soldados heridos en la que está muy implicado, el príncipe no se reunió con su padre, lo que el Palacio de Buckingham justificó con una "agenda muy apretada" del monarca.
Después de tres meses sin compromisos públicos, pero sin dejar de ejercer determinadas funciones oficiales, el soberano retomó algunas de sus actividades a principios de mayo.
El príncipe William, de 41 años, recibió el lunes información sobre sus nuevas funciones y debía abandonar la base aérea a bordo de un helicóptero Apache. El heredero al trono pasó más de siete años en el ejército británico, incluidos tres como piloto de helicóptero de rescate en la base de la Royal Air Force en la isla de Anglesey, en Gales, hasta 2013.
"Espero que les vaya muy bien en el futuro con el Príncipe de Gales como su nuevo coronel en jefe", dijo Carlos III a los soldados en su discurso. "Lo bueno es que es un muy buen piloto. Eso es alentador", añadió el soberano.