AFP, La Nación / GDA
Un gazatí de 37 años, que por la guerra en la Franja de Gaza quedó bloqueado hace un año en Cisjordania, fue la única víctima fatal del bombardeo iraní de este martes sobre territorio de Israel, tras ser impactado por los fragmentos de un misil que fue derribado en el aire y cayó a tierra sin explotar.
”Un trabajador palestino murió en Jericó al haber sido alcanzado por trozos de misil caídos del cielo”, declaró el gobernador Hosain Hanayel a la AFP.
Según Hanayel, se trata de un palestino de 37 años de la Franja de Gaza que había quedado bloqueado en esa localidad desde que empezó la guerra en su ciudad de origen, a raíz del ataque de terroristas de Hamas en el sur de Israel el 7 de octubre.
Según los medios de comunicación palestinos, Sameh al-Asali, de 37 años, trabajador originario de Jabaliya, en la Franja de Gaza, fue alcanzado en la aldea cisjordana de Nu’eima, cerca de Jericó. Otros cuatro palestinos resultaron heridos por la metralla del mismo misil.
Según información que circula en las redes sociales, corroborada por una imagen de su documento de identidad, al-Asali, padre de tres hijos, era uno de los miles de trabajadores gazatíes con permiso de trabajo israelí que quedaron varados en Israel el 7 de octubre y buscaron refugio en Cisjordania.
Imágenes y videos que circulan en las redes sociales muestran un fragmento de un misil de un metro de largo junto al cuerpo de Al-Asali, tendido en el suelo y cubierto con una sábana.
El gobernador cisjordano también indicó que se produjeron algunos incendios en la zona por la caída de los fragmentos del misil.
Cerca de una hora después del ataque, el ejército anunció a la población que ya podía salir de los refugios. El cuerpo armado había instado a los ciudadanos a permanecer cerca de zonas protegidas ante la amenazada de una agresión iraní de “gran alcance”.