Con información de EFE y AFP
Guatemala celebró elecciones presidenciales ayer domingo en una jornada que registró incidentes en varios puntos del país. Los electores acudieron a las urnas sin grandes ilusiones de superar la pobreza, violencia y corrupción, tras una campaña marcada por la exclusión de candidatos y persecución a la prensa.
Al menos tres municipios de los 340 que componen Guatemala sufrieron problemas e incidentes en su proceso electoral, según han detallado diversas fuentes.
La socialdemócrata Sandra Torres encabezaba ayer a última hora la intención de voto, seguida por el centrista Edmond Mulet, la derechista Zury Ríos y el oficialista de derecha Manuel Conde, según sondeos.
Las autoridades confirmaron la suspensión de los comicios en el municipio San José del Golfo, del departamento de Guatemala, debido a la renuncia de los funcionarios al mando de los comicios por amenazas en su contra.
Esto provocó que las fuerzas antimotines acudieran al lugar y dispersaran de los centros de votación a varias personas, sin que por el momento se reporten heridos. “El actual alcalde está acarreando votantes y tenemos duda sobre la legalidad del proceso, así no se puede desarrollar una elección”, declaró a EFE Ana Gudiel, fiscal del partido Unidad Nacional de la Esperanza.
Los pobladores disconformes piden a las autoridades electorales de Guatemala que se repita la elección en una nueva fecha.
Quema de papeletas
De igual forma, en el municipio de San Martín Zapotitlán, en el departamento de Retalhuleu (sureste), fueron quemadas diversas papeletas por personas molestas por el supuesto traslado de votantes falsos desde otro poblado. Los incidentes en San Martín Zapotitlán también fueron respondidos por las fuerzas antimotines de la Policía Nacional Civil (PNC) guatemalteca, con una persona herida por gases lacrimógenos.
Por su parte, en el departamento de Quiché (norte), fiscales del Ministerio Público decomisaron supuestas papeletas falsas marcadas en favor del partido oficial, Vamos, del actual presidente, Alejandro Giammattei.
La candidata Torres denunció que el oficialismo estaba “comprando votos”, tras sufragar en la mañana en una escuela de la capital. “El partido oficial no puede hacer regalos ni comprando votos, porque tenemos denuncias de que están comprando votos”, señaló.
Torres recordó que el presidente Giammattei -que llega al final de su mandato de cuatro años con 76% de desaprobación, según las encuestas- había asegurado en un mensaje al país el viernes que iba a respetar los resultados de la votación. “Pero dónde está la transparencia si está comprando votos el partido oficial”, expresó la exesposa del difunto mandatario Álvaro Colom.
22 opciones
El banderazo inicial para los comicios tuvo lugar ayer a las 7.00 hora local, de acuerdo a la reglamentación del Tribunal Supremo Electoral (TSE), y se extendió hasta las 18.00. Fueron 9,3 millones de personas las habilitadas por el TSE para emitir su voto en la onceava edición de los comicios desde la implantación de la democracia en 1986.
En las papeletas para la Presidencia, los ciudadanos se encontraban con 22 opciones, aunque son tres -Mulet, Ríos y Conde- los que tenían más posibilidades de pasar a la segunda vuelta, que se celebrará el 20 de agosto.
Además, en estos comicios se renuevan 160 diputados, 340 alcaldes y 20 representantes al Parlamento Centroamericano.
Los candidatos punteros hasta ayer a última hora eran Torres, la ex primera dama que pasó de la socialdemocracia a una postura más conservadora y que trata de alcanzar la Presidencia por tercera vez; el diplomático de centro-derecha Edmond Mulet que, según analistas, tiene la capacidad de concentrar el voto útil de los ciudadanos hartos de la corrupción, y la exdiputada conservadora Zury Ríos, la hija del dictador Efraín Ríos Montt que promete replicar las políticas antipandillas de Nayib Bukele en El Salvador.
Nunca, desde las primeras elecciones democráticas de 1985, un candidato ganó en la primera vuelta.