Con información de AFP y EFE
El juicio del magnate de los medios prodemocracia Jimmy Lai, acusado de crímenes contra la seguridad nacional, se abre hoy en Hong Kong, donde se expone a una condena a cadena perpetua. Lai, de 76 años -y que ya lleva tres en prisión- está acusado de “colusión con fuerzas extranjeras”, en virtud de la ley de seguridad nacional impuesta por China a Hong Kong en 2020, tras las protestas prodemocracia de 2019.
El caso de Jimmy Lai, que suscitó la indignación y la condena de la comunidad internacional, en particular del Reino Unido, país del que es ciudadano, debería permitir evaluar el nivel de las libertades civiles en Hong Kong.
Lai es el primero en enfrentarse al cargo de “colusión extranjera”, que puede ser sancionado con prisión perpetua. La policía ha ofrecido además grandes recompensas por los activistas democracia que han dejado la ciudad, una medida condenada por Estados Unidos y Reino Unido.
El cargo más serio contra Lai está vinculado a Apple Daily, un periódico en chino que fundó en 1995 y que llegó a ser el más popular de Hong Kong. El diario era crítico con Pekín y apoyó las enormes manifestaciones prodemocracia de 2019. Posteriormente pidió sanciones contra China y autoridades locales.
El medio fue obligado a cerrar en 2021 luego de que las autoridades utilizaron la ley de seguridad para allanarlo dos veces y congelar sus bienes evaluados en 18 millones de dólares hongkoneses (US$2,3 millones). Las autoridades acusaron a Lai y seis ejecutivos de Apple Daily de “conspiración para colusionar con fuerzas extranjeras”. Todos, salvo Lai, se declararon culpables y aceptaron ser testigos de la fiscalía.
Recompensa
La Policía de Hong Kong anunció que ofrecerá un millón de dólares hongkoneses (127.654 dólares) a quienes proporcionen información que conduzca al arresto de otros cinco activistas exiliados en el extranjero, y sospechosos de violar la Ley de Seguridad Nacional que Pekín impuso en la excolonia británica. La activista de Hong Kong refugiada en EEUU desde 2020, Frances Hui, condenó el viernes esta decisión de Hong Kong de ofrecer recompensas por su captura y la de otros disidentes.
El secretario de Estado estadounidense, Antony Blinken, denunció el viernes la “represión transnacional” de Hong Kong y “el deterioro de la otrora orgullosa tradición de esa ciudad de respetar el Estado de derecho”.