MÁS CASOS POR HABITANTES
Los 5.114 nuevos contagios eleva el total de casos en España a 364.196 desde el inicio de la pandemia del coronavirus.
El número de contagios por COVID-19 sigue creciendo en España, con 5.114 nuevos casos ayer martes, lo que lo convierte en el país europeo con más positivos por cada 100.000 habitantes, según el Centro Europeo de Prevención y Control de Enfermedades.
Los 5.114 nuevos contagios eleva el total de casos en España a 364.196 desde el inicio de la pandemia.
La región de Madrid se sitúa a la cabeza de las comunidades autónomas más afectadas por el virus, seguida de Aragón, País Vasco y Andalucía.
En cuanto a los fallecidos, van 28.670 en España.
Cataluña, donde desde ayer esta prohibido fumar al aire libre, incluidas las terrazas de bares y restaurantes, si no se mantiene la distancia interpersonal mínima de dos metros, continúa mejorando con respecto a las últimas semanas y notificó 557 nuevos infectados, la mitad que el lunes.
La tabla de muertes por COVID-19 por 100.000 habitantes en Europa la encabeza Rumanía con 3,1, seguida de Bulgaria (1,8), Luxemburgo (1), Bélgica (0,8) y España, Italia, Suecia, Polonia y Portugal (0,4).
Preocupación por nacionalismo
Las naciones que acumulen posibles vacunas contra el COVID-19 excluyendo a otras agravarán la pandemia, advirtió ayer martes el director de la Organización Mundial de la Salud (OMS), Tedros Adhanom Ghebreyesus, en su más reciente llamado a los países a unirse en un pacto de vacunas mundial.
La OMS tiene como fecha límite el 31 de agosto para fijar los términos de su “Centro de Vacunas Global COVAX” para compartir aspirantes a vacunas entre países ricos y países en desarrollo. Tedros dijo que envió una carta a los 194 estados miembros de la OMS, instándolos a participar.
La presión de Tedros para que las naciones se unan a COVAX se produce cuando la Unión Europea, Gran Bretaña, Suiza y Estados Unidos están firmando acuerdos con empresas que prueban posibles vacunas. Rusia y China también están trabajando en inmunizaciones, y la OMS teme que los intereses nacionales puedan obstaculizar los esfuerzos globales.
“Debemos impedir el nacionalismo de las vacunas”, dijo Tedros.