Con información de AFP
Una población enojada y desesperada insultó, lanzó barro y ahuyentó a la comitiva de autoridades encabezada por el presidente del gobierno español, Pedro Sánchez, y los reyes Felipe VI y Letizia durante su visita a Paiporta, el municipio de Valencia más golpeado por las inundaciones que dejaron al menos 217 muertos.
"¡Que os vayáis", "a ti no te falta agua", gritaba una mujer a poca distancia de la cara de la reina en el municipio de Paiporta, mientras la multitud coreaba "asesinos" e "hijos de p***" a las autoridades, entre las que también se encontraba el presidente regional valenciano, Carlos Mazón, y volaban objetos y barro, una situación que no se recuerda en España.
El presidente Sánchez fue evacuado por su equipo de seguridad y el presidente regional valenciano Mazón también desapareció durante la visita. Mientras tanto, Felipe VI insistió durante bastante rato en dialogar con la gente, protegido por sus guardaespaldas, constantemente zarandeados, pero finalmente abandonó el lugar junto a la reina.
Los incidentes llevaron a las autoridades a suspender la visita de los reyes a una segunda localidad, Chiva. Diversos videos muestran la situación.
Entendemos perfectamente la indignación de los españoles ante un presidente que les ha humillado.
— Solidaridad 🇪🇸 (@solidaridad_esp) November 3, 2024
Si hay detenidos o multados nuestros servicios jurídicos están a su disposición de forma gratuita. pic.twitter.com/aNlWTz6svH
El monarca pidió luego comprensión por la reacción de la gente. "Hay que entender el enfado y la frustración de muchas personas por lo mal que lo han pasado", dijo Felipe VI en una reunión del centro de coordinación de las tareas de rescate.
Por su parte, Sánchez dijo a la prensa que reconocía "la angustia" y "el sufrimiento" de los afectados, pero condenó "cualquier tipo de violencia". Mazón elogió la actitud "ejemplar" del rey.
El domingo por la noche, medios de comunicación españoles reportaron una posible implicación de grupos de extrema derecha en la trifulca de Paiporta.
"No permitiremos que grupúsculos radicales se aprovechen del dolor de la gente", reaccionó en la red social X la vicepresidenta primera del Gobierno, María Jesús Montero.
La población reprocha a las autoridades no haberles avisado de las grandes tormentas del martes y no haber hecho lo suficiente para paliar su sufrimiento.
Alerta naranja por la Dana
Entre tanto, el balance de víctimas de las lluvias del martes en España se elevó de 213 a 217 con el anuncio del hallazgo de tres muertos más en Pedralba, Valencia, y de una anciana en Letur, en la vecina región de Castilla-La Mancha, cuyo cadáver fue arrastrado 12 km por las aguas. A ellos hay que sumar un muerto en Andalucía, pero la práctica totalidad de las muertes -213- ocurrieron en Valencia.
Entre los fallecidos hay extranjeros, dos de ellos ciudadanos chinos, según dijo la embajada de China en España a la agencia oficial de noticias Xinhua.
Cinco días después, la Agencia estatal de meteorología española (Aemet) emitió una aleta roja —la más elevada— para el litoral valenciano por fuertes lluvias.
Tan pronto como empezaron a caer las primeras gotas en Valencia y sus alrededores, por la tarde, la policía empezó a circular por las calles pidiendo por megáfono a los vecinos que regresaran a sus casas, según una periodista de la AFP.
Finalmente, la alerta fue reducida a categoría naranja poco después de las 21:00, pero el ayuntamiento de Valencia decidió cerrar las escuelas el lunes para cumplir con las restricciones de desplazamiento impuestas por el gobierno regional.
Alfafar, Chiva, Utiel, Catarroja, Paiporta, Sedaví, Massassa y Aldaia son algunos de los municipios valencianos hasta ahora poco conocidos en el resto de España y que quedarán asociados para siempre a esta catástrofe.
Entre críticas de la población a la lentitud del desescombro, de la distribución de ayuda y de la recuperación de los cadáveres de estacionamientos y autos amontonados, el Gobierno anunció que un total de 7.500 militares y casi 10.000 policías y guardias civiles participarán en las tareas de rescate, en el mayor despliegue de fuerzas armadas jamás realizado en España en tiempos de paz.
La Policía Nacional anunció la detención de otras 20 personas por saqueos, lo que elevaría el total de arrestados por este delito a un centenar desde el martes.
El papa Francisco pidió este domingo a los fieles en el Vaticano "rezar por Valencia y las otras gentes de España que están sufriendo mucho estos días".