Con información de EFE y AFP
El actor Dick Van Dyke y la cantante Cher se encuentran entre las miles de personas que han tenido que ser evacuadas de sus hogares a consecuencia del incendio que se ha producido en la exclusiva zona de Malibú, en el estado de California, en el suroeste de Estados Unidos.
Van Dyke, que cumple 99 años el próximo viernes, dijo que él y su esposa, Arlene, huyeron de su hogar con sus mascotas cuando el incendio —bautizado Franklin— amenazó su zona, informó The New York Times.
"Arlene y yo hemos evacuado sanos y salvos con nuestros animales, excepto Bobo, que escapó cuando nos íbamos", dijo, refiriéndose a uno de sus gatos. "Estamos rezando para que esté bien y que nuestra comunidad en Serra Retreat sobreviva a estos terribles incendios", agregó, según el Times.
Liz Rosenberg, la publicista de Cher, dijo en una breve entrevista telefónica que la cantante fue evacuada a un hotel el lunes por la noche junto con sus mascotas. No proporcionó más detalles.
El incendio todavía sin controlar ha obligado a la evacuación de unas 6.000 personas y el cierre de carreteras y escuelas ante el riego de rápida propagación de las llamas en la ciudad de Malibú.
El incendio ha quemado unos nueve kilómetros cuadrados en menos de 24 horas y se extendió a lo largo de la costa del Pacífico, obligando al cierre de todas las escuelas en el centro y el este de Malibú, donde residen más de 10.000 habitantes, informó el departamento de Bomberos de California (FireCal).
Los equipos de bomberos trabajan a contrarreloj para apagar las llamas, que se originaron a la altura de la carretera de Malibu Canyon y el parque estatal Malibu Creek.
El Servicio Nacional de Meteorología mantiene hasta este miércoles un aviso de alerta roja por fuertes rachas de viento en el condado de Los Ángeles y el colindante Ventura, que podrían alcanzar hasta los 120 km/h.
Cómo es Malibú, localidad asediada por el incendio Franklin
La localidad, que se alza entre el mar pacífico y frondosas colinas, alberga lujosas mansiones de celebridades de Hollywood y millonarios en la costa oeste de California.
Más de 1.500 bomberos atacan las llamas por aire y por tierra en una compleja operación. Sin embargo, el incendio no ha podido ser contenido, informó el jefe del Departamento de Incendios de Los Ángeles, Anthony Marrone.
"Mientras que las condiciones climáticas actuales persistan, los fuertes vientos y la baja humedad seguirán desafiando a los bomberos en acción que luchan para contener el tenaz fuego", dijo Marrone en rueda de prensa.
Una inspección aérea arrojó un saldo preliminar de siete propiedades destruidas y ocho dañadas, comentó Marrone, quien espera tener una inspección más detallada del estrago este miércoles.
La causa del incendio está bajo investigación. La sequía actual y los "vientos de Santa Ana", como se conoce a las ráfagas fuertes y secas características de California, avivan las brasas y dificultan las operaciones.
Contribuye también para la propagación rápida de las llamas la cantidad de ramas, hojas y árboles secos en las florestas del área tras dos inviernos con temperaturas excepcionales en el oeste del país.
El cambio climático, exacerbado por la acción humana, es otro factor de peso que ha resultado en la cada vez más frecuente oscilación de fenómenos extremos: incendios más severos y feroces, sequías más intensas y períodos de lluvia más fuertes, entre otros.