La Nación/GDA
Una carretera en Carolina del Norte fue protagonista de una situación insólita, cuando se avistó un caimán, que bloqueaba el paso de los vehículos. El hecho se dio en el condado de Brunswick, cerca de Wilmington. Los bomberos del lugar debieron usar una de sus herramientas para espantarlo.

El caimán, de unos tres metros de largo, fue descubierto en una carretera muy transitada como es la River Road, lo que representaba un peligro tanto para los conductores como para el propio animal. Los oficiales de control de animales y la policía del condado, fueron alertados de inmediato para manejar la situación.

Al llegar al lugar, las autoridades se encontraron con el reptil inmóvil en medio de la carretera, que causaba congestión y curiosidad entre los conductores que se detenían para observar el inusual visitante. La situación requería una intervención rápida y segura para garantizar la proteccion de todos los involucrados.

Foto: Boiling Spring Lakes Fire Rescue

El método elegido para mover al caimán de la carretera fue ingenioso y efectivo. Los oficiales utilizaron una manguera de agua a presión para asustar al caimán y obligarlo a moverse hacia un área más segura. Este enfoque evitó el uso de fuerza física y permitió redirigir al animal sin causarle daño.

Los testigos quedaron impresionados al ver cómo el caimán reaccionaba al potente chorro de agua, desplazándose lentamente hacia la vegetación cercana. Finalmente, el reptil fue guiado de regreso a su hábitat natural, lejos del tránsito y del peligro inminente.

El caimán se adentró en la vegetación que rodea a la carretera, de acuerdo con lo informado por las autoridades. Boiling Spring Lakes, ubicado al oeste de Wilmington, es un entorno natural para los caimanes.

Tal como indicó una publicación de Facebook del Cuerpo de Bomberos de Boiling Spring Lakes, “a la 01:00, la Oficina del Sheriff del Condado de Brunswick solicitó nuestra ayuda para resolver un problema de tránsito inusual. Este visitante no deseado estaba tendido en medio de la carretera, abalanzándose sobre los vehículos que pasaban”, reflejaron.

Aunque los encuentros con caimanes no son comunes en Carolina del Norte, tampoco son completamente raros. Los caimanes americanos (Alligator mississippiensis) se encuentran principalmente en el sureste de Estados Unidos, incluyendo los estados de Florida, Luisiana, Georgia, Carolina del Sur y del Norte.

La población de caimanes en Carolina del Norte se concentra principalmente en las áreas costeras y los humedales del sureste del estado. Estos reptiles suelen habitar ríos, lagos, pantanos y otras zonas acuáticas, y su presencia en áreas más urbanizadas a veces ocurre cuando buscan nuevos territorios o fuentes de agua.

El Departamento de Recursos Naturales y Vida Silvestre de Carolina del Norte ofrece directrices sobre cómo actuar en caso de encontrarse con un caimán. Se recomienda mantener una distancia segura y no intentar alimentar o interactuar con estos animales. Las autoridades también sugieren reportar cualquier avistamiento de caimanes a las oficinas locales de vida silvestre para asegurar una respuesta adecuada.

Los expertos subrayan que, aunque los caimanes pueden parecer intimidantes, rara vez representan una amenaza directa para los humanos si se los deja en paz. En la mayoría de los casos, los animales prefieren evitar el contacto humano y se desplazarán si se sienten molestos o amenazados.

El incidente del caimán en Carolina del Norte también pone de relieve la importancia de la conservación y la gestión de la vida silvestre. Los caimanes son una especie protegida bajo la Ley de Especies en Peligro de Extinción en Estados Unidos, y su población ha sido cuidadosamente monitoreada y gestionada para asegurar su supervivencia.