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La Justicia de Los Ángeles, en Estados Unidos, condenó a Alkiviades, conocido como Alki, David a pagar 900 millones de dólares a una modelo que trabajó para él y a la que abusó sexualmente en reiteradas ocasiones entre 2016 y 2019. El empresario es heredero de un imperio embotellador y se hizo conocido por liderar una empresa de hologramas que creaba avatares de celebridades ya fallecidas, como Michael Jackson y Tupac Shakur.

La víctima, cuyo nombre no fue revelado durante el proceso judicial para proteger su identidad, es una modelo que trabajó para Alki en su compañía Hologram USA. Según explicó la mujer, su jefe intentó besarla a la fuerza durante un viaje de trabajo a Grecia, pero ella se resistió. Si bien su jefe se disculpó en el momento, la mujer terminó siendo despedida a finales del mismo año.

Pero ese no fue el fin definitivo de su relación laboral. En 2018, la modelo fue invitada a ser embajadora de su marca de fabricación de cannabis, Swiss-X. De acuerdo al testimonio de la mujer, Alki la llevó a una habitación de hotel y le pidió que probara una muestra del producto.

Según recoge la demanda, la víctima se sintió desorientada y vio al empresario masturbándose. Incluso obligó a la mujer a tocarle el pene. En 2019, la víctima aseguró que fue violada en una habitación durante una reunión de negocios.

En 2018, el ex modelo fue invitada a ser embajadora de su marca de fabricación de cannabis, Swiss-X. Alki supuestamente la llevó a una habitación de hotel y le pidió que probara una muestra del producto. Según la demanda, la víctima se sintió desorientada y vio al empresario masturbándose. Incluso obligó a la mujer a tocarle el pene. En 2019, la víctima dijo que fue violada en una habitación durante una reunión de negocios.

Foto: Facebook.

El empresario fue acusado de abuso sexual en varias instancias anteriores, al punto tal de que sus empleados se referían a un cuarto de la sede de California de la compañía como la "sala de violación".

El abogado de la mujer, Gary Dordick, calificó las acciones de Alki de "despreciables" y celebró lo que llamó "uno de los veredictos de agresión sexual más grandes de la historia".

Según recoge el medio estadounidense Los Ángeles Times, el empresario ya había pagado alrededor de 70 millones de dólares en otras demandas por conducta sexual impropia. Ex empleadas de la compañía denunciaron casos en el que el jefe les bajó los pantalones, las agarró del cuello, los senos y la zona pélvica, así como obligarlas a besarlo.

Alki negó la acusación en su cuenta de la red social Instagram y la tildó de "fake news", afirmando que los portales de noticias están reproduciendo una información del sitio web TMZ, que está, según Alki, manejado por su "nemesis", Fox Corporation.