Carlos Eduardo Espina no juega en la selección. No sale en la televisión, ni tampoco lo reconocen en las esquinas. Pero Carlos, con más de 10 millones de seguidores en redes sociales, probablemente sea hoy el uruguayo más influyente del mundo.

Nacido en Uruguay hace 25 años, Carlos emigró con su padre (uruguayo) y su madre (mexicana) a Texas, Estados Unidos, cuando tenía cinco años. A los 17 comenzó a trabajar activamente por los derechos humanos.

Su historia despertó el interés internacional cuando comenzó a escribir cartas a mano a los inmigrantes detenidos en la frontera. Luego, comenzó a trabajar en una ONG para dar apoyo a la comunidad latina de bajos recursos. Donó su sueldo para pagar la luz de sus vecinos durante la pandemia de covid-19 y participó de diversas campañas de recolección de fondos.

En 2020 se graduó en Ciencias Políticas y Estudios Latinoamericanos en Vasser College y su interés era seguir con la labor humanitaria. Pero la pandemia no le permitió sostener ese proyecto y decidió darle una oportunidad a las redes sociales.

“La ONG en la que trabajaba perdió fondos por la pandemia y se me ocurrió empezar a hacer videos en redes sociales sobre política e inmigración. Lo que era diversión pasó a ser mi trabajo” cuenta Carlos a El País en comunicación telefónica desde Texas.

Tras graduarse, siguió con un posgrado en las escuela de leyes de la Universidad de Nevada, formación que le dio pie para asesorar cada vez más a través de las redes a los inmigrantes que buscaban una solución a sus problemas.

“A comienzos de este año recibí una llamada de la Casa Blanca donde me dijeron que estaban interesados en conversar por el contenido que hago. Allí fui a hablar con el equipo de redes sociales donde pude expresar cuáles son las preocupaciones de la comunidad latina en Estados Unidos”, detalla el joven.

Foto: Carlos Eduardo Espina

“En la Casa Blanca para cada tema hay un equipo asesor. Y por mi contenido, no solo de entretenimiento sino desde el conocimiento de cómo llegar a la gente y saber lo que les preocupa, comenzaron a consultarme por mi trabajo comunitario”, agrega Carlos, quien a día de hoy entre TikTok, Instagram y Facebook suma más de 10 millones de seguidores.

Así, luego de diversas charlas, Carlos llegó a reunirse con la vicepresidenta de Estados Unidos, Kamala Harris. “Pude transmitirle que hay mucha gente insatisfecha con las promesas de campaña que no se han cumplido”, explica Espina sobre las múltiples consultas que recibe la comunidad latina, una población que acumula más de 11 millones de personas indocumentadas.

Foto: Instagram/ Carlos Eduardo Espina

Luego de su encuentro con Kamala Harris, la vicepresidenta le transmitió a Carlos que su labor tenía un valor de tanto peso que, cuando el presidente decidiera anunciar nuevas medidas, lo llamarían para que estuviera presente. Y así fue.

“Me invitaron a concurrir a la Casa Blanca y me dijeron que iba a poder grabar un video con el presidente Joe Biden”, cuenta Espina.

Así, el joven filmó un video conversando con Biden de los dos importantes anuncios que haría ese mismo día y, dos cambios históricos en la política migratoria estadounidense.

Tras el breve video —que tuvo un fallo técnico—, Carlos pensó que se daría la vuelta y se iría. Sin embargo, el presidente Biden mantuvo una charla de unos 20 minutos con él y compartieron una anécdota que hoy, al recordarla, aún lo emociona.

"Me dijo algo que me dejó impactado. Estábamos en el Cuarto Azul de la Casa Blanca. No había cámaras, ni videos, solo estábamos nosotros. Desde allí se ve directamente el monumento de Abraham Lincoln. Me señaló el monumento y me dijo: ‘Ese hombre luchó para preservar esta nación y para que todos fueran tratados por igual. Estaría muy contento de verte hoy aquí’", recuerda Espina.

Y es que, a pesar de "la fama" que le han hecho en el último tiempo asociados a su edad, Biden, para Carlos, "es un hombre muy lúcido". "Y lo digo luego de conocerlo, porque tengo diferencias políticas con él, pero fue una persona amable y actualizada a las cosas que están pasando hoy", remarca.

Sobre su futura colaboración con la Casa Blanca, Carlos enfatiza que no tiene "relación formal" con el gobierno de los Estados Unidos, sino que "por ser una persona de influencia en la comunidad latina" siempre estará dispuesto a ofrecer su punto de vista y conocimiento. "Sea que le llamen los demócratas o los republicanos, siempre estaré dispuesto a dar mi perspectiva".