La Nación/GDA
El sector inmobiliario en Miami, Florida, muestra una gran diversidad en el origen de los compradores de propiedades. Solo en el 2023, la ciudad recibió US$ 5.100 millones por parte de inversores extranjeros. Según un reciente informe de la Asociación de Agentes Inmobiliarios de Miami. Entre argentinos, colombianos y brasileros, los latinos acapararon más de un tercio de las compras de viviendas en esa ciudad.

A nivel general, las estadísticas del estudio arrojaron que este no fue un buen año para el sector en términos de ventas a inversores del extranjero. El volumen de ingresos de 2023 fue el mismo que el de 2021, cuando persistían las consecuencias económicas de la pandemia por el coronavirus y representaron una marcada baja del 30%, respecto de los US$ 6.800 millones de 2022.

En el ranking de extranjeros que más propiedades adquirieron el año pasado, los colombianos ocuparon el primer lugar, con 15% del total de las compras de bienes raíces por parte de extranjeros y una tendencia alcista si se compara con años previos. En segundo lugar se posicionaron los argentinos (14%), mientras que el podio lo completaron los brasileños (7%).

Los venezolanos, que en 2019 eran de los mayores compradores, en 2023 quedaron cuartos en la lista con 6%. Debajo de ellos, se ubicaron canadienses (6%), mexicanos (5%), peruanos (5%), ecuatorianos (5%), chilenos (4%) y franceses, los europeos que más propiedades adquirieron, con un 3% del total de las inversiones extranjeras.

Foto: Captura / Asociación de Agentes Inmobiliarios de Miami

A su vez, el ranking se reordena si se filtra por cantidad de dinero invertido. Bajo esa variable, quienes encabezan por lejos son los brasileños, que el año pasado invirtieron en promedio casi US$ 1.000.000 en cada compra. En segundo lugar, quedaron los venezolanos, que destinaron una media de US$ 521.500; luego, los colombianos (US$ 446.800), canadienses (US$ 437.700) y argentinos (US$ 340.400).

Según reveló el estudio, la mayoría de los nuevos dueños extranjeros no tiene intenciones de residir o vivir en las casas que compraron. En concreto, el 71% de ellos afirmó que compró la casa con el objetivo de alquilarla o tenerla como residencia de vacaciones.

Si se mira en detalle, se observa que entre los colombianos, primeros en el ranking, esta tendencia es aún más marcada. Solo el 10% de los inversores oriundos de ese país contaron utilizarán como su residencia habitual, mientras que el 54% aseguró que lo ve como una oportunidad de negocio a través del alquiler.

El 68% de los argentinos y el 25% de los brasileños reconocieron tener estas mismas intenciones detrás de su inversión, una tendencia completamente opuesta a los venezolanos, entre los que el 49% tenían el sueño de instalar su hogar principal en la localidad.

Por otra parte, entre las localidades preferidas por casi todos los inversores latinoamericanos destacan Fort Lauderdale y West Palm Beach, a excepción de los mexicanos, que demostraron tener una mayor predilección por Cape Coral-Fort Myers y Port St. Lucie, donde compraron el 28% y 14% de ellos, respectivamente.