Revelan complot de Irán para asesinar a Trump; EEUU cree que no está relacionado con el intento de magnicidio

Mientras se investiga el fallo en la seguridad durante el atentado al expresidente de EE.UU. y candidato republicano, Donald Trump, sale a la luz un supuesto complot iraní para asesinarlo.

Compartir esta noticia
Trump: Inteligencia de EE.UU. rastreó la amenaza, independiente del atentado de sábado.
Donald Trump.
Foto: AFP

EFE, The New York Times
En medio de fuertes cuestionamientos a la seguridad en torno al expresidente Donald Trump, las agencias de inteligencia estadounidenses están rastreando lo que consideraban un posible complot de asesinato iraní contra el aspirante republicano a la Casa Blanca en las semanas previas a que un joven armado abriera fuego el sábado pasado contra el expresidente, dijeron ayer martes varios funcionarios estadounidenses. Agregaron que no creían que la amenaza estuviera relacionada este atentado que hirió a Trump.

De hecho, la inteligencia había llevado al Servicio Secreto a mejorar la seguridad del expresidente antes de su mitin de campaña el sábado en Butler, Pensilvania, dijeron funcionarios al New York Times. Sin embargo, cualesquiera sean las medidas adicionales que se tomaron, no impidieron que un joven de 20 años trepara al techo de un galpón cercano para dispararle a Trump, rozándole la oreja derecha, a punto de matarlo.

La campaña de Trump fue informada de la amenaza poco antes del tiroteo del sábado, según una fuente informada sobre la situación. La última amenaza surge del antiguo deseo de Irán de vengarse del ataque ordenado por Trump en 2020 que mató al general Qassem Soleimani, un comandante de seguridad e inteligencia iraní responsable de la muerte de cientos de soldados estadounidenses a lo largo de los años.

“Como hemos dicho muchas veces, hemos estado rastreando las amenazas iraníes contra ex funcionarios de la administración Trump durante años, remontándonos a la última administración”, dijo Adrienne Watson, portavoz del Consejo de Seguridad Nacional, en un comunicado. “Estas amenazas surgen del deseo de Irán de buscar venganza por el asesinato de Qassem Soleimani. Consideramos que este es un asunto de seguridad nacional y nacional de máxima prioridad”.

Watson enfatizó que el complot iraní era independiente del intento de asesinato de Butler. “La investigación del intento de asesinato del expresidente Trump el sábado está activa y en curso”, dijo. “En este momento, las autoridades han informado que su investigación no ha identificado vínculos entre el tirador y ningún cómplice o cómplice, nacional o extranjero”.

CNN informó anteriormente sobre la información sobre la amenaza de Irán. Alejandro Mayorkas, secretario de Seguridad Nacional, insinuó una amenaza que emana del extranjero durante una sesión informativa el lunes en la Casa Blanca.

“El panorama de amenazas es muy dinámico, tanto a nivel interno como con el aumento del extremismo violento interno”, dijo, y agregó: “Por supuesto, también hemos visto aumentar el entorno de amenazas externas”.

Day 1 - Republican Party presidential nominating convention
El aspirante republicano a la Casa Blanca apareció sorpresivamente en la Convención del Partido Republicano.
Foto: AFP

Los fallos de seguridad

El FBI sigue intentando esclarecer las razones por las que Matthew Thomas Crooks disparó al candidato republicano, aunque ya ha podido acceder a su celular y ha interrogado hasta a cien testigos del suceso.

Más de 48 horas después del incidente, persisten las preguntas sobre qué motivó el intento de asesinato y también cómo fue posible que un joven de 20 años pudiera subirse a un techo y disparar hasta ocho veces antes de ser abatido por los agentes del Servicio Secreto.

En declaraciones a la cadena CNN, Mayorkas llegó a admitir que hubo un “fallo” en la seguridad alrededor de Trump. “Cuando digo que algo así no puede suceder, estamos hablando de un fallo”, afirmó Mayorkas, quien como titular de Seguridad Nacional tiene bajo su batuta al Servicio Secreto, encargado de proteger a los políticos de Estados Unidos.

Por ahora, lo único que se sabe es que el autor del atentado actuó solo y usó un fusil semiautomático AR-15 que había sido comprado legalmente por su padre en 2013, según dijo este lunes a The Washington Post una fuente familiarizada con la investigación.

Hasta ahora, el FBI ha realizado cerca de 100 entrevistas con personal de las fuerzas del orden que estaba en el mitin de donde Trump fue atacado, así como asistentes a ese evento y otros testigos, según se detalló este lunes en un comunicado.

El intento de asesinato a Trump, el primer incidente de ese tipo desde que el que Ronald Reagan sufrió en 1981, sucitó importantes interrogantes sobre los posibles fallos que hubo en los protocolos de seguridad del Servicio Secreto y ha hecho que el Gobierno de EE.UU. anuncie una investigación independiente.

Según reveló la cadena NBC, el Servicio Secreto había identificado desde hace días como un potencial riesgo de seguridad ese techo, ubicado a solo 135 metros de donde Trump iba a hablar en el mitin, pero fuera del perímetro de seguridad del evento.

El Servicio Secreto afirmó que la seguridad del edificio desde donde se disparó era responsabilidad de las autoridades locales, aunque el fiscal del condado desmintió esta versión. La directora del Servicio Secreto, Kimberly Cheatle, dijo ayer a la canal ABC que las autoridades locales estaban encargadas de asegurar el edificio y confirmó que la policía estaba dentro mientras Crooks estaba en el techo. Cheatle asumió la “responsabilidad” como directora de la agencia, pero se mantendrá en el cargo.

El candidato presidencial republicano, Donald Trump, con la oreja vendada tras el atentado.
El candidato presidencial republicano, Donald Trump, con la oreja vendada tras el atentado.
Foto: Brendan Smialowski/AFP
MILWAUKEE

Una reaparición con épica

La primera jornada de la Convención Nacional Republicana celebrada en Milwaukee, en el estado clave de Wisconsin, dejó una imagen para el recuerdo: Trump reapareció por sorpresa ante un público totalmente entregado, tarde en la noche del lunes, y con la oreja derecha vendada por la herida que sufrió al ser tiroteado el sábado en un mitin en Pensilvania. La escena estuvo plagada de detalles propios de un drama épico. Además de la venda en la oreja, levantó el puño emulando el mismo gesto que hizo segundos después de salvar la vida por tan solo un centímetro. El público gritaba “Fight” (lucha), lema que se ha convertido en el grito de guerra trumpista desde ese día. La ovación fue tan emocionante que incluso Trump mostró el rostro compungido.

¿Encontraste un error?

Reportar

Temas relacionados

Donald TrumpPartido Republicano

Te puede interesar