La Nación/GDA
El comienzo de la temporada de serpientes en Texas está marcado por la llegada de la primavera boreal a mediados de marzo. Estos reptiles utilizan esta época más cálida para reproducirse hasta que llega el verano, que ocurrirá este mes de junio. Para hacerlo, ponen huevos y hacen nidos en los sitios que más cómodos les resultan, ya sea en el jardín o incluso dentro de una casa.

La empresa Omnis Pest Control explica que estos reptiles son criaturas solitarias que pueden compartir territorio en común. Sin embargo, aclaran que fuera de los meses de invierno y la temporada de reproducción, no interactúan socialmente entre la misma especie.

Por lo tanto, entre la primavera y el verano, las hembras emiten feromonas para atraer a los machos y forman una bola de serpientes en la que se reproducen. Omnis aclara que eso no es un nido, sino una etapa previa. Una vez que se complete el acto, cada una tomará caminos separados, por eso es mejor esperar y no actuar de inmediato.

Foto: Omnispest

Al contrario de los pájaros, que juntan hojas y ramas para armar su nido, las serpientes no construyen una estructura, sino que se mudan a guaridas y madrigueras hechas previamente por otros animales. En otros casos, usan espacios pequeños, oscuros y frescos. Al estar en lugares chicos, “su eliminación suele resultar un desafío”, aclararon desde Omnis. Este animal pone de dos a 25 huevos, aunque en el caso de las culebras la cifra puede ascender hasta los 85.

Según los especialistas, fuera de las madrigueras y cuevas, los lugares más comunes donde las serpientes anidan son:

• Montones de madera y escombros
• Grietas en cimientos
• Césped alto
• Debajo de las rocas
• Tocones y sistemas de raíces
• En paredes, sótanos y espacios de fácil acceso

Los expertos explican que la mayoría de especies de serpientes dejan su nido desatendido. La hembra, cuando siente que está lista para poner huevos, busca el espacio indicado para que sus crías crezcan y luego se retira, sin esperar que nazcan. Sin embargo, hay otras víboras que abandonan el lugar, pero se quedan cerca para protegerlo. Por esto, los especialistas consideran que hay que prestar mucha atención a los alrededores antes de intentar deshacerse de los nidos.

Desde Omnis consideran que la clave para evitar el trabajo de eliminar nidos es prevenir su proliferación. “Al eliminar las fuentes de alimento y los hábitats preferidos, se reduce la probabilidad de que sea necesario retirarlos de su propiedad”, señalan.

Una de las claves es tener plantas en el exterior que eviten su aparición, además de mantener el jardín ordenado y cerrar cualquier hueco en los cimientos de la casa que le pueda servir como cueva. “Sellar todos los agujeros y grietas en los cimientos y el revestimiento, rellenar las áreas alrededor de las tuberías para eliminar el acceso”, recomiendan.

Foto: Vertebrate Zoology

Otro consejo para evitar nidos de serpientes es quitarles todas las comidas fáciles. Las serpientes se alimentan de diversos roedores, insectos, anfibios y otros reptiles, y muchos de estos también se consideran plagas. Si no se reproducen los del primer grupo, será más probable que las víboras no se acerquen a ese espacio, sino que busquen otro en donde haya alimento.

En los meses que no corresponden a la primavera y el verano, las serpientes hibernan y, durante esa temporada, comparten un espacio. Estos lugares suelen ser guaridas subterráneas en donde las víboras aprovechan las bajas temperaturas, detienen sus funciones corporales y reposan para conservar energía.

En muchos casos, varias especies habitan el mismo espacio y, cuando la temperatura del ambiente empieza a subir, emergen todas juntas para tomar sol y buscar comida. “La gente entra en pánico y piensa en la remoción urgente de nidos de serpientes al ver múltiples ejemplares saliendo”, cuentan los especialistas. Sin embargo, aclaran que la quita de esos espacios es innecesario.