Con información de AFP
El presidente de Estados Unidos, Donald Trump, firmó una orden ejecutiva para eliminar la restricción a la presión del agua en las duchas, una medida que según la Casa Blanca, "hará que las duchas estadounidenses sean grandes otra vez". Trump se ha quejado insistentemente de la falta de presión de agua en los baños de su país, que atribuye a las regulaciones federales de preservación de agua.
"En mi caso me gusta tomar una buena ducha, cuidar mi precioso pelo", declaró Trump a periodistas cuando firmaba la orden el miércoles en la Casa Blanca. "Tengo que estar 15 minutos bajo la ducha para que se moje. Sale por goteo, es ridículo", insistió. "Ridículo. Lo que haces es acabar lavándote las manos durante el quíntuple de tiempo, para que sea la misma agua. Y vamos a liberarla para que la gente pueda vivir", argumentó.
El decreto lleva por título “Mantener una presión de agua aceptable en las duchas”. La orden ejecutiva instruye al Departamento de Energía a repeler las regulaciones "radicalmente verdes" que limitan el agua de la ducha a 2,5 galones (9,5 litros) por minuto.
Según la Casa Blanca, la orden "libera a los estadounidense de las regulaciones excesivas que convierten un objeto casero básico en una pesadilla burocrática" y pone fin a la "guerra de Obama-Biden contra las duchas".
Desde su primer gobierno (2017-2021), Trump ha atacado las normas de presión de agua para las duchas, inodoros, lavaplatos y otros aparatos de uso cotidiano, y ha acusado a sus rivales demócratas de querer eliminar las estufas a gas.
Sin embargo, según el Proyecto de Concienciación sobre Normas de Electrodomésticos, "las regulaciones para las duchas le ahorran dinero a los consumidores en sus recibos de agua y electricidad y ayudan al medio ambiente", indicó la oenegé en un informe de 2024. A su vez, Las normativas establecidas durante la presidencia de Obama, según la Agencia de Protección Ambiental (EPA), ayudaban a una familia promedio a reducir su factura anual de agua en unos 380 dólares y a conservar más de 17 galones diarios (64 litros).
También durante su primer mandato, el presidente impulsó una revisión a nivel federal de las regulaciones sobre la eficiencia del uso del agua en accesorios de baño. Su interés particular en los inodoros generó polémica y convirtió el hashtag #ToiletTrump en tendencia en redes sociales, según informó Bloomberg.