AFP, EFE/ Washingon, Kiev, Moscú
El presidente Donald Trump hablará esta semana con su par ruso Vladimir Putin, informó ayer domingo un emisario estadounidense, mientras Washington presiona a Moscú para que acepte una tregua con Ucrania.

El presidente estadounidense propuso un alto el fuego en Ucrania de 30 días. Kiev aceptó la propuesta, en cambio, Moscú no ha dado una respuesta clara. Sin embargo, el presidente Trump se mostró positivo. “Creo que (Putin) estará de acuerdo. Realmente lo creo. Creo que le conozco bastante bien y que estará de acuerdo”, dijo Trump en una entrevista pregrabada y difundida en el programa Full Measure ayer.

El emisario de Trump para temas internacionales, Steve Witkoff, quien se reunió por varias horas con Putin días atrás, dijo, por su parte, a la cadena CNN que “los dos presidentes tendrán buenas y positivas conversaciones esta semana”.

Waltz consideró posteriormente en Fox News que Trump “es el único mandatario que puede conseguirlo” (llegar a un acuerdo). Previamente, las cancillerías de ambos países informaron que el secretario de Estado de Estados Unidos, Marco Rubio, y el ministro de Relaciones Exteriores ruso, Serguéi Lavrov, hablaron por teléfono el sábado y “discutieron las próximas etapas” para poner fin a la guerra en Ucrania.

La cancillería rusa, aludiendo a la conversación, indicó ayer que los jerarcas abordaron “los aspectos concretos” de la continuación de las discusiones en Arabia Saudita y “acordaron permanecer en contacto”, sin mencionar la propuesta de tregua de Estados Unidos.

Pese a las recientes tensiones entre el presidente estadounidense y su homólogo ucraniano, Volodimir Zelenski, Kiev ha aceptado un alto el fuego de 30 días mediado por Estados Unidos si Moscú detiene sus ataques en el este de Ucrania. Sin embargo, Vladimir Putin ha puesto condiciones que van más allá de lo que se pedía en el acuerdo de Estados Unidos con Ucrania.

Putin subrayó que está a favor de la tregua, pero advirtió que ve problemas en su aplicación y verificación y consideró deseable hablar por teléfono con su homólogo estadounidense.

Desde su regreso a la Casa Blanca en enero, el presidente Trump ha expresado que busca terminar con el conflicto de más de tres años y se ha acercado a Putin.

La llamada entre los jefes de la diplomacia rusa y estadounidense se dio luego de una cumbre virtual organizada por Londres el sábado. El primer ministro británico, Keir Starmer dijo a los 26 líderes que se unieron a la llamada que debían centrarse en cómo fortalecer a Ucrania, proteger cualquier alto al fuego y mantener la presión sobre Moscú.

“Mi sensación es que, tarde o temprano, (el presidente ruso) va a tener que sentarse a la mesa y entablar un debate serio”, dijo Starmer. La UE también estudiará la posibilidad de desplegar sus tropas en territorio ruso, lo que actuaría como forma de presión al régimen ruso para empujarlo a negociar el fin de la guerra.

Zelenski reemplazó al jefe del Estado Mayor, según un decreto emitido ayer domingo, en un momento en que las tropas de Kiev afrontan dificultades frente a los soldados rusos.

Según un comunicado, Anatoliy Bargylevych fue reemplazado por Andriy Gnatov, quien “fue encargado de aumentar la eficiencia de la gestión”.

El ejército ucraniano busca reorganizar sus efectivos para mejorar la coordinación. “Estamos transformando sistemáticamente las Fuerzas Armadas de Ucrania para mejorar su eficacia en combate. Esto implica reestructurar el sistema de mando e implementar estándares claros”, afirmó el ministro de Defensa, Rustem Umerov, en su página de Facebook.

Gnatov, añadió, tiene “más de 27 años de experiencia militar”. Bargylevych, a su vez, fue nombrado como el inspector jefe del Ministerio de Defensa, detalló.

En la región de Donetsk, epicentro de los combates en el este de Ucrania, el ejército ruso, más grande y mejor equipado, ha estado avanzando lentamente durante más de un año, a pesar de sufrir importantes pérdidas.

Rusia anunció la evacuación de 371 civiles rusos de las áreas que ha reconquistado de manos de las fuerzas ucranianas en su región fronteriza de Kursk.

Los civiles rusos quedaron atrapados cuando Ucrania lanzó una incursión sorpresa en esta región rusa en agosto de 2024, más de dos años después de la ofensiva rusa en Ucrania.

“En total desde el 12 de marzo, desde las áreas habitadas liberadas, 371 personas han sido trasladadas, incluidos 14 niños”, dijo el gobernador interino de la región, Alexander Khinshtein, en las redes sociales. Según Khinshtein, 220 de los civiles fueron alojados temporalmente y el resto con familiares.

El Ministerio de Defensa ruso publicó imágenes de personas en su mayoría ancianas siendo trasladadas en pequeñas camionetas desde las localidades de Sudzha y Kazachya Loknya, que estuvieron en poder de Ucrania.

Los familiares de los civiles atrapados en las áreas controladas por Ucrania habían pedido un corredor civil para evacuarlos.