The New York Times
El tiroteo en el mitin de Donald Trump que conmocionó a todo el país mató a un padre de dos hijos e hirió gravemente a otros dos hombres el sábado por la noche.

Las víctimas, todos hombres adultos, incluyen un veterano bombero voluntario y un veterano del Cuerpo de Marines de Estados Unidos. Todos eran del área de Pittsburgh, según la Policía Estatal de Pensilvania. Uno murió en el lugar, mientras que las dos víctimas gravemente heridas fueron trasladadas al Hospital General Allegheny en Pittsburgh y se encuentran en condición crítica pero estable, dijeron las autoridades.

A medida que el domingo comenzaron a surgir más detalles, llegaron tributos y oraciones por las víctimas y sus familias, incluso de parte de funcionarios como el alcalde de Pittsburgh, Ed Gainey, y el gobernador de Pensilvania, Josh Shapiro.

Corey Comperatore, de 50 años, recibió un disparo fatal en la cabeza después de lanzarse para cubrir a sus familiares que lo acompañaron a la manifestación, según el gobernador.

Shapiro dijo el domingo que Comperatore “murió como un héroe” y añadió: “Corey era el mejor de nosotros”.

Comperatore era padre de dos hijos de Sarver, Pensilvania, trabajaba en una empresa de fabricación de plástico y le encantaba pescar. Pasó varios años como bombero voluntario y en un momento se desempeñó como jefe de la Compañía de Bomberos Voluntarios del Municipio de Buffalo. Asistió a la cercana iglesia Cabot, donde fue seleccionado como futuro fideicomisario en 2021, ayudando a supervisar cuestiones como la propiedad y los seguros de la iglesia.

En entrevistas, amigos y vecinos lo describieron como un “buen hombre”, dedicado a su esposa y sus dos hijas y a su servicio como bombero.

Kip Johnston, el actual jefe de la compañía de bomberos, dijo que Comperatore fue su jefe durante unos tres años. “Era un gran líder”, afirmó. “No se puede encontrar a una persona más humilde”.

Un vecino, Matt Achilles, recordó cuando Comperatore quería donar el tradicional jamón de Navidad y le preguntó si Achilles conocía a alguien que lo necesitara. Se lo dio uno a una madre soltera con cinco hijos.

Foto: AFP

David Dutch, de 57 años y oriundo de New Kensington (Pensilvania), trabajó en Siemens durante décadas, según Jennifer Veri-Grazier, su hermana. En su día fue miembro del Cuerpo de Marines.

Dutch ha sido partidario de Trump durante mucho tiempo, junto con otros miembros de su familia, dijo Veri-Grazier. Ella le tomó una foto a su hermano antes de que saliera el sábado, con una camisa con la bandera y gafas de sol. Parecía "extasiado", dijo.

Ahora, Dutch está hospitalizado con daños en el hígado y costillas rotas, y en espera de otra cirugía, dijo su hermana. “Estaba ejerciendo sus derechos y fue a la manifestación, y no merecía nada de esto”, agregó Veri-Grazier.

Copenhaver, de 74 años, es de Moon Township, Pensilvania. Los registros muestran que estaba registrado como demócrata. Está casado, tiene al menos un hijo y toca en una banda, según sus amigos.

Larry Wheeler, quien fue a la escuela secundaria con Copenhaver, dijo que la semana pasada hablaron sobre Trump, aunque no sabía que Copenhaver iría al mitin.

Albert Quaye, un supervisor de Moon Township, dijo que conoció a Copenhaver hace unos años en una reunión de la junta local de supervisores, a la que Copenhaver asistió para compartir sus inquietudes sobre un proyecto de desarrollo cerca de su casa. Parecía que entonces se contagió del virus de la política local y seguía volviendo a las reuniones, dijo Quaye. “A veces estaba allí con nosotros en las reuniones nocturnas”, contó.

Según Quaye, Copenhaver estaba jubilado. Una página de LinkedIn que parecía pertenecer a Copenhaver indicaba que trabajaba en la Junta de Control de Bebidas Alcohólicas de Pensilvania.

Quaye no tenía más detalles sobre la condición de Copenhaver, pero dijo que era optimista sobre su pronóstico. "Jim tiene 74 años y está saludable", dijo.