SOBORNOS DE QATAR

La eurodiputada griega Eva Kailí, implicada en un espectacular escándalo de corrupción que involucra a Qatar, defendió ayer miércoles su inocencia pero seguirá en prisión a la espera de una audiencia el 22 de diciembre.

Kaili, de 44 años y quien se desempeñaba como vicepresidenta del Parlamento Europeo, fue detenida el fin de semana a raíz de investigaciones de la fiscalía belga. La eurodiputada socialdemócrata es acusada de recibir sobornos de Qatar para defender en el Parlamento Europeo los intereses del emirato. Qatar niega las acusaciones.

A raíz del escándalo, el Parlamento Europeo destituyó a Kiali de su cargo de vicepresidenta, en una votación que tuvo 625 votos a favor, uno en contra y dos abstenciones.

Kaili fue además expulsada del Partido Socialista Griego (Pasok-Kinal), y removida del bloque de los socialdemócratas en el Parlamento Europeo.

La pareja de Kaili, Francesco Giorgi, y el exeurodiputado italiano Pier Antonio Panzeri, también seguirán detenidos por este caso.

De acuerdo con el abogado de Kaili en Bélgica, André Risopoulos, la eurodiputada no acudió a la audiencia celebrada ayer miércoles en el Palacio de Justicia de Bruselas debido a una huelga de funcionarios judiciales en Bélgica, motivo por el que su defensa solicitó un aplazamiento.

En tanto, en Atenas, su abogado Michalis Dimitrakopoulos, aseguró que Kaili “es inocente”. La eurolegisladora no “tiene ninguna relación con el dinero hallado en su domicilio (...), no conocía la existencia de este dinero”.

En el domicilio de Kaili los investigadores hallaron bolsas con unos 150.000 euros en efectivo.

El abogado aseguró que habló varias veces por teléfono con la eurodiputada detenida, y afirmó que “sólo su pareja” con la que vivía, puede dar “respuestas sobre la existencia de este dinero”.

En tanto, el padre de Kaili fue localizado con una maleta que contenía 750.000 euros en efectivo.

También fueron encontrados 600.000 euros en el domicilio de Panzeri, el exeurodiputado socialista italiano que está preso por este caso y que dirige una organización no gubernamental en Bruselas.

En Grecia, la dirección del partido Pasok-Kinal también presiona para que Kaili renuncie a su escaño de eurodiputada, de acuerdo con fuentes de esa formación política.

El escándalo es de tal magnitud que la presidenta del Parlamento Europeo, Roberta Metsola, aseguró el martes que se trata de un “ataque” contra la democracia europea.

El caso también tiene un fuerte impacto en Grecia, donde los casos de corrupción gangrenan el país.

La prensa griega ha informado en las relaciones entre Kaili y el magnate greco-ruso Ivan Savvidis, dueño, entre otras cosas, del club de fútbol Paok de Salónica y exdiputado en la Duma rusa.

Kaili, quien saltó a la fama como presentadora de noticieros en la televisión, ocupó un escaño en el Parlamento griego entre 2007 y 2012, y alcanzó una banca en el Parlamento Europeo en 2014. Había llegado al cargo de vicepresidenta hace 11 meses.