EFE, AFP
El régimen iraní activó rápidamente el proceso para elegir al sucesor del presidente Ebrahim Raisí, muerto este domingo en un accidente de helicóptero. Irán celebrará elecciones presidenciales el 28 de junio.
Hasta entonces quedará al frente del gobierno el vicepresidente primero, Mohamad Mojber, según lo dispuso ayer lunes por el líder supremo de Irán, Ali Jameneí, el poder real en esta república islámica
Raisí murió el domingo en un accidente de helicóptero en la provincia de Azerbaiyán Oriental debido a un “fallo técnico”. El aparato fue hallado ayer lunes por las dificultades en las operaciones de rescate derivadas del mal tiempo.
En el accidente también fallecieron el ministro de Exteriores, Hosein Amir Abdolahian, el gobernador de Azerbaiyán Oriental, Malik Rahmati, el líder de los rezos de los viernes en Tabriz, Mohammad-Ali Al-Hashem, además de dos pilotos, un asistente de vuelo, el jefe de seguridad presidencial y un guardia.
Raisí llegó al poder en las elecciones presidenciales de 2021, que contaron con la menor participación hasta entonces en la historia de la República Islámica: 48,8%. Ataviado siempre con un turbante y un largo abrigo negro religioso, Raisi sucedió al moderado Hassan Rohani.
En las recientes elecciones parlamentarias de marzo se registró la participación más baja en los 45 años de la República Islámica: solo un 41% del electorado acudió a las urnas.
La República Islámica ha dado siempre gran importancia al alto número de votos como prueba de su legitimidad y respaldo popular.
Las elecciones del próximo 28 de junio se celebrarán en medio de un fuerte descontento de la población por la mala situación económica y la represión social, en especial a las mujeres con la nueva campaña para reimponer el uso del velo.
La muerte de Raisí, de 63 años, abre un periodo de incertidumbre política en Irán, peso pesado de Oriente Medio, en un momento en el que la región está sacudida por la guerra en la Franja de Gaza entre Israel y el grupo terrorista Hamás, un aliado de la República Islámica.
Raisi era considerado como uno de los favoritos para suceder a Jamenei, de 85 años.
En Rusia, el presidente Vladimir Putin rindió homenaje a un “político notable” y “verdadero amigo de Rusia”, en un mensaje de condolencias, y el presidente sirio, Bashar al Asad, proclamó su “solidaridad” con Irán, que le apoya en la guerra civil en su país. Por su parte, el presidente chino, Xi Jinping, calificó la muerte de Raisí de “gran pérdida para el pueblo iraní”.
Raisi se había desplazado el domingo a la provincia de Azerbaiyán Oriental para inaugurar junto al presidente azerbaiyano, Ilham Aliyev, una presa en la frontera entre ambos países.
En su rueda de prensa conjunta, Raisi renovó su apoyo a Hamás frente a Israel. “Pensamos que Palestina es la primera cuestión del mundo musulmán”, dijo.
En un mensaje de condolencias, la organización terrorista agradeció el “apoyo a la resistencia palestina”.
El Hezbolá libanés proiraní rindió igualmente homenaje a Raisi como “protector de los movimientos de resistencia”.
Nacido en noviembre de 1960, Raisi hizo el grueso de su carrera en el sistema judicial. Antes de ser presidente, fue fiscal general de Teherán y fiscal general del país. El fallecido presidente figuraba en la lista negra estadounidense de responsables iraníes sancionados por violaciones de los derechos humanos.
Sangre en las manos
Raisi “era un hombre con las manos manchadas de sangre”, aseveró John Kirby, portavoz del Consejo de Seguridad de EE.UU., al decir que Raisi era responsable de abusos atroces a los derechos humanos en Irán y que apoyó a grupos como Hamás. Sin embargo, señaló que “como en cualquier otra situación, lamentamos la muerte y ofrecimos condolencias oficiales como corresponde”.
El portavoz del Departamento de Estado, Matthew Miller, transmitió las “condolencias oficiales” por la muerte de Raisí y demás pasajeros del helicóptero. “Mientras Irán selecciona un nuevo presidente, reafirmamos nuestro apoyo al pueblo iraní y a su lucha por los derechos humanos y las libertades fundamentales”, manifestó en un comunicado Miller.
En una posterior rueda de prensa, Miller definió a Raisí como uno de los responsables de “la brutal represión al pueblo iraní durante casi cuatro décadas”, incluidas las ejecuciones de miles de disidentes políticos en 1988. “Lamentamos cualquier pérdida de vidas. No queremos ver morir a nadie en un accidente de helicóptero, pero eso no cambia su historial”, dijo Miller.
El portavoz también reveló que Irán le pidió a Estados Unidos asistencia en las labores de búsqueda y recuperación del helicóptero siniestrado, pero no dio más detalles al respecto.
Mientras tanto, en otra rueda de prensa, el secretario de Defensa estadounidense, Lloyd Austin, afirmó que Estados Unidos “no tuvo nada que ver” con ese accidente y, al ser preguntado sobre si Israel pudo estar involucrado, afirmó que será la investigación que están llevando a cabo las autoridades iraníes la que arroje luz sobre lo ocurrido.
Un “fallo técnico”, dijo la agencia oficial
El accidente del helicóptero en el que murió el presidente iraní, Ebrahim Raisí, se debió a un “fallo técnico”, informó la agencia estatal IRNA, mientras se ha creado una comisión para investigar la causa del siniestro. “Raisí murió el domingo en un accidente de helicóptero debido a un fallo técnico cuando viajaba de la presa Khoda Afarin a la Refinería de Petróleo de Tabriz”, informó IRNA.
El medio estatal, sin embargo, no ofreció más información respecto a las causas del accidente que ocurrió el domingo en la zona montañosa de la región de Varzeqan, en la provincia de Azerbaiyán Oriental. El helicóptero siniestrado era un Bell 212 estadounidense, bimotor y con capacidad para 15 personas, adquirido en 1970, según el diario Hamshahri. Irán cuenta con un antiguo parque de aviones y helicópteros dado que no ha tenido fácil acceso a nuevos modelos desde la instauración de la República Islámica en 1979. En el accidente también fallecieron el ministro de Exteriores, Hosein Amir Abdolahian, entre otros funcionarios.
Joe Biden - Presidente de EE.UU.
El presidente de Irán Ebrahim Raisi tenía “las manos machadas de sangre”, declaró ayer un portavoz de la Casa Blanca, John Kirby, al margen de que el gobierno estadounidense ofreció sus condolencias.
Vladimir Putin - Presidente de Rusia
Putin llamó ayer al presidente interino iraní, Mohamad Mojber. “Hemos perdido a un amigo y aliado fiable”, dijo Putin en referencia a Ebrahim Raisí. “No hay duda de que era un verdadero patriota”, añadió.
Luis Lacalle Pou - Presidente uruguayo
“En este momento de consternación, Uruguay expresa su solidaridad con Irán y renueva votos por el bienestar de su pueblo”, concluye un comunicado del Ministerio de Relaciones Exteriores.
Papa Francisco - Vaticano
“Envío mis condolencias por el fallecimiento del presidente Ebrahim Raisí; el ministro de Exteriores, Hosein Amir Abdolahian, y todos los que fallecieron en el accidente de helicóptero” del domingo, expresó.