INVESTIGACIÓN
Rusia y los países occidentales, especialmente Estados Unidos, se culpan mutuamente de las explosiones.
Las explosiones que afectaron en septiembre a los gasoductos Nord Stream 1 y 2en el mar Báltico, construidos para transportar el gas ruso a Europa, fueron un sabotaje, anunció ayer viernes el fiscal encargado de la investigación preliminar realizada en Suecia.
“Los análisis que se han realizado muestran restos de explosivos en varios de los objetos extraños encontrados”, dijo el fiscal Mats Ljungqvist, encargado de la investigación preliminar tras el hallazgo a finales de septiembre de cuatro enormes fugas de gas en los ductos que unen Rusia con Alemania.
Rusia y los países occidentales, especialmente Estados Unidos, se culpan mutuamente de las explosiones.
“La continuación de la investigación preliminar va a mostrar si alguien puede ser procesado”, agregó la fiscalía.
El Servicio de Seguridad Sueco (SAPO), que lleva a cabo la investigación bajo el liderazgo de la fiscalía, confirmó los resultados en un comunicado separado, pero ambas autoridades se negaron a dar más informaciones.
Dos de las averías se registraron en la zona económica de Suecia y dos en la de Dinamarca. Las inspecciones preliminares submarinas reforzaron las sospechas de un sabotaje, ya que los escapes fueron precedidos por explosiones, según los investigadores.
A finales de octubre, el consorcio Nord Stream, cuyo accionista mayoritario es la empresa rusa Gazprom, envió un navío civil de bandera rusa para inspeccionar la zona sueca.
En noviembre, Nord Stream también recibió la autorización para revisar la zona danesa y todavía hay una investigación en curso.
Ambos gasoductos están en medio de las tensiones geopolíticas desde el inicio de la guerra en Ucrania, atizadas por la decisión de Moscú de interrumpir el suministro de gas hacia Europa en represalia a las sanciones occidentales.
A principios de noviembre, el operador Nord Stream informó que un tramo submarino de unos 250 metros había quedado destruido y que se habían descubierto cráteres de “3 a 5 metros” de profundidad en el fondo marino.
Rusia pidió ayer continuar la investigación hasta encontrar a los culpables del sabotaje de los gasoductos Nord Stream y Nord Stream 2, tras las informaciones de las autoridades suecas sobre el hallazgo de restos de explosivos en objetos recuperados en el lugar del siniestro.
“Es muy importante no detenerse, es muy importante establecer quién está detrás de la explosión”, dijo el portavoz del Kremlin, Dmitri Peskov, en su rueda de prensa diaria.
Agregó que el propio hecho de que lleguen datos de que se trata de “un sabotaje o de un acto terrorista -se puede llamar de cualquier manera- confirma una vez más la información que tenía la parte rusa”.
Según el portavoz del Kremlin aún es prematuro hablar de la posibilidad de reparar los gasoductos. “Primero habrá que tener una evaluación completa de daños”, dijo.