AFGANISTÁN
Más de 15 muertos fue el saldo de las dos explosiones. Al menos 12 soldados de Estados Unidos murieron en estos ataques.
Las mortales explosiones en el aeropuerto de Kabulel jueves provocaron "pánico" entre los afganos que se concentraban en el exterior del recinto con la esperanza de escapar del régimen talibán que tomó el control de Afganistán.
Doce militares estadounidenses murieron y 15 resultaron heridos en dos ataques suicidas en el aeropuerto de Kabul ejecutados por militantes del grupo yihadista Estado Islámico (EI), informó el Pentágono, amenazando con represalias.
Un denso humo se elevaba en el cielo mientras afganos con las ropas empapadas de sangre intentaban huir del lugar del atentado. Los heridos graves eran transportados en carretillas. En las redes sociales se podía ver a un niño aferrado al brazo de un hombre con una herida en la cabeza.
"Cuando la gente escuchó la explosión fue el pánico. Los talibanes empezaron a disparar al aire para dispersar a la gente", dijo un testigo a AFP.
Apenas cinco días antes de la fecha límite marcada por Estados Unidos para su retirada, el 31 de agosto, las agencias de inteligencia Occidentales alertaban de un ataque inminente, y Joe Biden, hizo referencia al riesgo de atentado de la rama regional del Estado Islámico.
Los dos artefactos explotaron con la caída del sol, dejando más de 15 y numerosos heridos, según el Hospital de Emergencias de Kabul.
El Pentágono afirmó que una de las explosiones tuvo lugar frente a la Abbey Gate del aeropuerto y la otra cerca del Hotel Baron.
Abbey Gate es uno de los tres puntos de acceso al aeropuerto internacional Hamid Karzai, donde miles de afganos se han aglomerado en los últimos días buscando huir de los islamistas radicales.
El Hotel Baron, a unos 200 metros de Abbey Gate, había sido utilizado por algunas naciones occidentales para organizar las evacuaciones aéreas que comenzaron el 14 de agosto.