Redacción El País
Durante la conferencia de prensa ofrecida este sábado por el Ejército uruguayo, después de la muerte de un militar integrante del equipo de cascos azules, ocurrida el viernes en la República Democrática del Congo, el general Mario Stevenazzi afirmó que el ataque por parte de un grupo rebelde en el marco de un conflicto armado “no fue casualidad”.

El incidente fue impulsado por Fuerzas del M23, un grupo rebelde armado que, según el Ejército uruguayo, había “intensificado sus operaciones militares” en la Provincia de Kivu Norte. A consecuencia de ese ataque, murió el soldado Rodolfo Álvarez, integrante del Grupo de Escuadrones de Caballería Mecanizado n.°1.

Este ataque también dejó heridos al sargento Adrián Fernández, el soldado Franco Olivera, el soldado Elder Piriz (del Grupo de Artillería de Defensa Antiaérea n.° 1) y el cabo Roque Francia (del Grupo Artillería n.º 5).

“El soldado Rodolfo Álvarez falleció aproximadamente a las 12, hora del Congo, producto en el vehículo en el cual estaba”, indicó el general Stevenazzi este sábado. “En un inicio se habló de un impacto que había entrado por la escotilla. En realidad, haciendo las evaluaciones posteriores, se determinó que pegó al costado de las escotillas, pero marca una enorme precisión y algún medio que dirigió ese impacto. Quiere decir que estamos hablando con medios muy avanzados”.

El Ejército informó también que el sargento Adrián Fernández fue evacuado y trasladado a un hospital en Uganda, “a los efectos de recibir el tratamiento, acorde a la entidad de sus heridas”.

El Consejo de Seguridad de la ONU se reúne este domingo a pedido de Uruguay.

Leonardo Maine/Archivo El Pais

El pasado jueves, el Ejército ya había informado de un incidente. Según se indicó, fuerzas del M23 -Movimiento 23 de Marzo, un grupo rebelde militar- ocuparon la ciudad de Sake, y las Fuerzas Armadas del Congo intentaban recuperar la zona.

El general Stevenazzi además afirmó durante la conferencia de prensa de este sábado que cree que se trató de un ataque planificado.

“Se sufrió el impacto directo de un proyectil. Estimamos que de mortero. Estimamos también que fue dirigido, porque el impacto fue certero… con un arma de fuego indirecto”, dijo, y añadió: “Eso no es normal y no fue casualidad. ¿Qué quiero decir con esto? Que acá hubo una planificación y un golpe a matar a alguien de Naciones Unidas. En este caso, a un integrante de nuestro ejército”.