BRASIL
Los gobernadores mantuvieron una tensa reunión con el ministro de Salud y otros miembros del Ejecutivo, a fin de presionar por la definición de un aún incierto plan de vacunación.
Los gobernadores de los 27 estados de Brasil manifestaron ayer martes su malestar con la falta de un plan de inmunización contra el COVID-19 y las dudas que existen en relación a las vacunas que recibirá el Gobierno de Jair Bolsonaro.
Algunos en forma presencial y otros mediante teleconferencias, los gobernadores mantuvieron una tensa reunión con el ministro de Salud, Eduardo Pazuello, y otros miembros del Ejecutivo, a fin de presionar por la definición de un aún incierto plan de vacunación.
Brasil, con 210 millones de habitantes, es uno de los países más afectados por la pandemia y, acumula hasta ahora más de 177.000 muertos y 6,6 millones de casos.
El gobernador de San Pablo, Joao Doria, uno de los más enconados adversarios de Bolsonaro y que ha anunciado que pretende aplicar en su estado desde el próximo 25 de enero la vacuna del laboratorio chino Sinovac, volvió a acusar al Gobierno de “politizar” el asunto.
Doria demandó en particular que la Agencia Nacional de Vigilancia Sanitaria (Anvisa), que debe aprobar las vacunas que se apliquen en el país, acelere los trámites para la vacuna china, que hasta ahora ha sido tratada con desdén por Bolsonaro y su Gobierno.
La vacuna de Sinovac está en la última fase de test en San Pablo, y Doria prevé que toda la documentación será entregada a Anvisa este mismo mes, por lo que exige un análisis de emergencia y más rápido para la debida certificación.
El ministro Pazuello, según diversas fuentes, confirmó que la Anvisa aún no cuenta con toda la documentación sobre la vacuna china y que tardará unos 60 días para certificar cada uno de los antídotos, con lo que volvió a proyectar el inicio de la aplicación en el país para fines de febrero o marzo, como ya había anticipado hace unos días.
El ministro también reiteró que el Gobierno se ha asegurado una compra de 130 millones de dosis de la vacuna desarrollada por la Universidad de Oxford y que además recibirá otras 42 millones de la iniciativa Covax, de la OMS.
También citó que, este mismo martes, el Ministerio de Salud anunció que avanza en negociaciones para adquirir otras 70 millones de dosis a Pfizer y Biontech, la cual comenzó a ser aplicada este mismo martes en el Reino Unido, el primer país del mundo en iniciar la vacunación. (Ver página B1).
Bolsonaro ofrecerá vacunas para todos los brasileños de forma gratuita, una vez que el regulador de salud Anvisa le dé la aprobación científica y legal.
En una publicación en su cuenta de Twitter, Bolsonaro dijo que el Ministerio de Economía le ha asegurado que no faltarán recursos para suministrar la vacuna a todo el que quiera.