PARA VENDER
La víctima estuvo en cautiverio durante seis meses e ingresó al hospital al borde de la muerte, con los brazos cubiertos de hematomas y marcas de agujas.
Un hombre chino de 31 años fue secuestrado y mantenido cautivo durante seis meses como "esclavo de sangre" en Camboya. La víctima pasó ese tiempo acostada en una cama rodeada por cuatro guardias; sus captores le sacaban sangre de las venas contra su voluntad repetidas veces. Según las autoridades locales, el material recolectado se vendía posteriormente a compradores particulares en internet.
La Embajada de China en Camboya publicó un comunicado sobre el caso este miércoles. El texto informa que la policía camboyana abrió una investigación sobre el crimen, que se llevará a cabo con la cooperación de oficiales chinos.
La banda extrajo sangre a la víctima desde agosto de 2021. Recién se detuvieron el 12 de febrero de este año, fecha en la que el hombre fue ingresado en un hospital cuando estaba al borde de la muerte, con los brazos cubiertos de hematomas y marcas de agujas.
Después de tres días en el hospital, la víctima mostró una mejoría en su salud y fue visitada por funcionarios de la Embajada de China.
El hombre relató a los medios de comunicación que se había negado a participar en un esquema de fraude. Sin embargo, la banda descubrió que era huérfano y no tenía forma de pedir rescate, por lo que decidieron usarlo como "esclavo de sangre".
Dijo que trabajaba como guardia de seguridad en empresas en Shenzhen y Beijing, pero que un anuncio de trabajo falso lo atrajo a la región autónoma de Guangxi, en el sur de China. Una vez en la ciudad, fue secuestrado por una banda y llevado a Camboya a punta de pistola.
En la ciudad camboyana de Sihanoukville, la víctima finalmente fue vendida por US$18.500 a otra banda que administraba una empresa de fraudes en internet. Con su negativa a trabajar para el grupo, sus captores comenzaron a sacarle sangre a la fuerza.
El individuo también señaló que fue amenazado con que le extirparían sus órganos para venderlos en el mercado ilegal. Agregó que había otros siete hombres secuestrados y retenidos en el mismo lugar donde él estaba.
La Embajada de China en Camboya informó en su sitio web que pidió a la policía camboyana que priorizara el caso. Los funcionarios chinos también advirtieron que los compatriotas que deseen trabajar en Camboya deben seguir los canales formales de contratación y no creer en los anuncios falsos de trabajos bien remunerados.