Con información de O Globo/GDA
La argentina Florencia Aranguren, de 31 años, fue encontrada muerta en la mañana de este miércoles camino a Praia José Gonçalves, en Búzios, Brasil. Fue asesinada a puñaladas y golpes alrededor de las 8:30 de la mañana.
Según el diario "Folha de Búzios", todos los días salía a pasear con su perro por la región. El animal permaneció junto al cadáver durante toda la investigación policial por el asesinato. Al lugar llegaron agentes de la Policía Militar y Civil, así como el secretario de Seguridad Pública de Búzios, Sergio Ferreira.
El perro no reaccionó cuando la policía llegó al lugar y permaneció, atado con un collar, cerca del cuerpo de la mujer. Un hombre fue encontrado lavándose y tratando de quitar las marcas de sangre de su cuerpo en un condominio cercano, y la Policía lo llevó a la escena del crimen. Entonces el perro intentó atacarlo. Para la Policía esa reacción fue clave y detuvo al sospechoso. La investigación está a cargo de la 127ª DP (Armação de Búzios).
Según medios locales, la policía no difundió el nombre del sospechoso, pero se dio a conocer que tiene 32 años y antecedentes penales por hurto y lesiones corporales.
Con apenas 100 metros de arena, la Praia José Gonçalves es poco conocida por los turistas en Búzios. A 11 kilómetros del Centro, es una de las playas más bellas y conservadas de la región.
Según da cuenta el medio argentino TN, Florencia había viajado el domingo pasado al país limítrofe con la intención de quedarse a vivir allí. Fue una amiga quien identificó su cuerpo, a la espera de que viajen familiares. Según el sitio g1, el informe de la autopsia ya está completo, pero aún no se publicó información sobre la causa de la muerte y si hubo un intento de violación.
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