Agencia EFE
La Policía sudafricana, junto a rescatistas voluntarios, recuperaron en el transcurso de dos días los cuerpos de al menos 78 mineros ilegales de una mina de oro abandonada, que está cerrada desde hace meses con el objetivo de desalojar a los trabajadores.
"En el segundo día de las operaciones, 106 mineros ilegales fueron rescatados y detenidos por explotación minera ilegal. 51 fueron declarados muertos", precisó en un comunicado la policía, que ya había recuperado los restos de nueve personas en el primer día de la intervención.
"La gente que está bajo tierra se está peleando por ser rescatada primero (...) El lugar huele a cuerpos en descomposición", explicó este miércoles a una emisora de radio local uno de los rescatistas voluntarios.
Aunque las autoridades sospechan que cientos de personas permanecen en la mina, "no es fácil decir cuánta gente hay bajo tierra debido a las distancias de los túneles que conducen a varios pozos", añadió el rescatista, con experiencia personal y familiar en la minería ilegal.
Lo que se sabe hasta ahora
Según informó la Policía a última hora del martes, un total de 106 mineros vivos fueron subidos a la superficie este martes y otros 26 el lunes, en la Mina de Oro de Buffelsfontein (BGM, por sus siglas en inglés), a unos 160 kilómetros de Johannesburgo y de más de 2 kilómetros de profundidad.
El rescate se está llevando a cabo con una grúa que hace descender una jaula una vez cada hora en una operación que tendrá un coste total estimado de 12 millones de rands sudafricanos (algo más de 610.000 euros), según las autoridades sudafricanas.
La portavoz policial brigadier Athlenda Mathe detalló que, desde agosto de 2024 y hasta el pasado 12 de enero, más de 1.576 mineros ilegales fueron detenidos y 1.540 siguen bajo custodia policial, incluyendo 997 mozambiqueños, 427 zimbabuenses, 118 lesotenses, 21 sudafricanos y un malauí, entre otros.
De ellos, 121 han sido ya deportados a sus países y 46 han sido declarados culpables de minería ilegal y de violar las leyes migratorias del país, señaló Mathe.
Se cree que son cientos los mineros ilegales, conocidos localmente como 'zama-zamas' (expresión coloquial en lengua zulú que significa 'arriesgarse' o 'intentarlo de nuevo'), que están atrapados bajo tierra en diferentes pozos de Stilfontein desde hace más de dos meses.
Los mineros denunciaron que hombres armados los estaban reteniendo
A mediados del pasado octubre la Policía bloqueó el suministro de agua y comida para forzar su salida, pero los envíos se reanudaron en diciembre como resultado de una orden judicial y después de la fuerte presión de activistas por los derechos humanos y de miembros de la comunidad local, que también acusaron a la Policía de haber retirado las cuerdas que los mineros usaban para salir.
Los que han salido a la superficie en los últimos meses han afirmado que hombres armados los estaban reteniendo en la mina y se quedaban con la comida enviada, mientras vídeos grabados presuntamente bajo tierra muestran un escenario de horror por la escasez de comida y agua, con un número indeterminado de bolsas con cadáveres y decenas de personas extremadamente delgadas.
La operación de rescate se puso en marcha este lunes en respuesta a un orden emitida el pasado día 10 por el Tribunal Superior de Pretoria tras una petición urgente presentada por un hombre cuyo hermano se encontraba entre los cientos de mineros atrapados.
Esta crisis se enmarca en la operación policial "Vala Umgodi" ('Cerrar la mina', en zulú), puesta en marcha en diciembre de 2023 para atajar la minería ilegal en el país y que, hasta el pasado mes de noviembre, había propiciado la detención de más de 13.690 sospechosos en siete provincias.