La desinformación, desde la propaganda hasta los contenidos creados por la inteligencia artificial, es una amenaza para la libertad de prensa en el mundo, alertó este miércoles Reporteros Sin Fronteras (RSF), que también señaló los efectos de la inestabilidad política en los medios de Latinoamérica. Esta postura es expresada en su informe, dado a conocer en el Día Internacional de la Libertad de Prensa.
Las condiciones para el ejercicio del periodismo son "adversas" en siete de cada 10 países y satisfactorias solo en tres de cada 10, según la clasificación anual de la ONG, que incluye 180 estados y territorios. Noruega y Corea del Norte se mantienen en el primer puesto y el último, respectivamente, de acuerdo con la edición del informe de este año.
No obstante, uno de los cambios más significativos se da, según RSF, en Brasil, que tras la salida del expresidente Jair Bolsonaro, quien "atacó sistemáticamente a periodistas y medios durante todo su mandato", ha subido 18 puestos hasta situarse en el lugar 92.
La edición de 2023 del informe hace hincapié en las consecuencias de la desinformación. En 118 países, es decir, en dos tercios de los evaluados en la lista, la mayoría de los expertos que han respondido al cuestionario reseñan "la implicación de actores políticos de sus países en campañas de desinformación masiva o de propaganda", precisa la ONG.
El texto señala "los dramáticos efectos" en la libertad de prensa de "la industria del engaño en el ecosistema digital".

La libertad de expresión en Uruguay
Por su parte, el Centro de Archivos y Acceso a la Información Pública (CAinfo) indicó que "la situación de la libertad de expresión en de los periodistas en Uruguay continúa siendo compleja debido a restricciones y amenazas".
En el último año, se han registrado 66 de estas, lo que supone un descenso de tres casos en comparación al 2022 (donde hubo 69), pero de todas formas está muy por encima de años como el 2021 (49 casos) y 2020 (26).
"El caso más preocupante del período es la amenaza de muerte sufrida por la periodista de Cerro Largo Silvia Techera, que tuvo esta represalia como consecuencia de sus reportes sobre las actividades del crimen organizado en la frontera con Brasil", indicó un informe de la organización.
"Por otro lado, resulta llamativo el impacto que tuvo para la libertad de expresión la vasta cobertura realizada por los medios de comunicación del caso de Alejandro Astesiano. Once de los episodios registrados tuvieron que ver directamente con algún tipo de cobertura o comentario periodístico relacionado con el caso del exjefe de la custodia presidencial", estableció.
"Asimismo, es importante subrayar que en dos de los episodios mencionados fue directamente el presidente Luis Lacalle Pou quien atacó a un sector del periodismo, sin aportar elementos que respaldaran sus afirmaciones", señaló Cainfo. "Este último caso forma parte de la tendencia creciente de estigmatización del periodismo por parte de voceros gubernamentales, que se consolida en este informe (19 episodios)", indicó.
CON INFORMACIÓN DE AFP