EFE
El Gobierno de Israel aseguró ayer miércoles que 22 de los 129 rehenes que siguen cautivos en Gaza están muertos, cuyos cuerpos afirmó que están en poder de la organización terrorista palestina Hamás. El portavoz del Gobierno de Israel, Eylon Levy, en rueda de prensa en Jerusalén, declaró que fueron “asesinados” por Hamás. Levy reclamó a Cruz Roja que “debe hacer más” para asistir a los rehenes más vulnerables que “han sido enterrados vivos” en su cautiverio.

El ataque de Hamás a Israel el pasado 7 de octubre provocó 1.200 personas y unos 240 rehenes fueron llevados a Gaza. Por otro lado, 110 rehenes han sido liberados con vida, 86 israelíes y 24 extranjeros, mientras el Ejército israelí ha recuperado los cadáveres de otros once, entre ellos tres asesinados por error por soldados israelíes. De los 129 que se estima aún secuestrados, 118 son israelíes y 11 extranjeros, entre ellos los 22 muertos según las autoridades israelíes.

Por otro lado, el grupo chií libanés Hezbolá lanzó ayer miércoles una serie de proyectiles contra Israel, a lo que sus Fuerzas de Defensa respondieron con fuego, en una nueva andanada de hostilidades en la zona fronteriza que dejó tres muertos en Líbano, informaron fuentes oficiales. Las sirenas antiaéreas se activaron en la mañana de ayer en Rosh Hanikra, una turística localidad en el extremo noroeste de Israel colindante con Líbano y el Mediterráneo, y el Ejército israelí confirmó que “se identificaron varios lanzamientos (de cohetes) que cruzaron desde el Líbano”.

El sistema de defensa antiaéreo “interceptó con éxito varios de los lanzamientos”, mientras que otros cayeron en terrenos deshabitados, “según el protocolo”, informó un vocero castrense. Las Fuerzas de Defensa israelíes “atacaron los focos de fuego”, añadió y “áreas adicionales en el Líbano”, explicó. Hezbolá reivindicó ayer la autoría de cinco ataques contra el norte de Israel, entre ellos un lanzamiento de misiles de alto calibre tipo “Burkan” hacia un puesto militar y un ataque simultáneo contra varios grupos de soldados empleando drones, proyectiles y artillería.

La formación chií también reivindicó ayer en una serie de comunicados otras dos acciones con armas, sin especificar posiciones militares, así como un lanzamiento de misiles teledirigidos. El Ejército informó que en la noche del martes un avión de combate de las Fuerzas de Defensa de Israel atacó un sitio militar de Hezbolá, sin dar más detalles. La Agencia Nacional de Noticias de líbano informó que al menos tres personas murieron a causa de un bombardeo israelí contra una vivienda en el sur del país, entre ellas un combatiente de Hezbolá, así como su hermano y cuñada.

La agencia no especificó si todas las víctimas eran civiles, pero el movimiento chií confirmó en un comunicado que el fallecido identificado como Ali Ahmed Bazzi pertenecía a sus filas. Israel anunció el martes que se está preparando para “todos los escenarios” bélicos en su frontera con Líbano al recrudecerse las hostilidades con Hezbolá.

“Estamos preparándonos para todos los escenarios si no se encuentra una solución diplomática a las constantes violaciones de Hezbolá de la resolución del Consejo de Seguridad de la ONU”, que fue emitida en 2006 tras la guerra entre el grupo chií e Israel, indicó en conferencia de prensa Daniel Hagari, portavoz del Ejército israelí.

La frontera vive su mayor tensión desde la guerra que libraron Hezbolá e Israel, a raíz de un recrudecimiento de las agresiones por parte de las milicias propalestinas al día siguiente del estallido de la guerra entre Hamás e Israel.