TENSIÓN POLÍTICA EN BRASIL
El primer mandatario insiste con su teoría de que puede haber un fraude a favor del expresidente Luiz Inácio Lula da Silva en las próximas elecciones.
Jair Bolsonaro sufrió una derrota en el Congreso, que el martes por la noche rechazó su proyecto para que se emita un comprobante en papel del voto en las próximas elecciones, lo que lo llevó a insistir con su teoría de que puede haber un fraude a favor del expresidente Luiz Inácio Lula da Silva. Bolsonaro afirmó que algunos diputados fueron “presionados” o “chantajeados”.
Su iniciativa en favor de un sistema mixto que combine el voto electrónico con un comprobante en papel fue debatida en la Cámara Baja y, de los 308 votos requeridos para su aprobación, obtuvo 229, con lo que fue archivada y olvidada para las elecciones presidenciales de octubre de 2022.
Aún así, Bolsonaro subrayó que, si bien no logró el apoyo necesario, fueron menos los diputados que se pronunciaron en contra, que sumaron 218, en una votación en la que además no participaron unos 60 legisladores. Según el presidente, eso demuestra que “al menos la mitad” de los 513 diputados “no cree en el voto electrónico”, que Brasil adoptó en 1996 y que hasta ahora no había sido objeto de denuncias de fraudes, en las que Bolsonaro insiste desde hace meses.
“No tengo pruebas”, reconoció, pero reiteró sus dudas respecto al sistema electoral, sobre las cuales garantizó que son compartidas “por la mayoría del pueblo” y por muchos diputados que rechazaron el proyecto o no votaron por “presiones y chantajes”.
En su opinión, y también admitiendo que no puede probarlo, esas “injerencias” que llevaron a algunos legisladores a rechazar el voto impreso fueron responsabilidad del Tribunal Superior Electoral (TSE), que defiende el sistema de votación electrónica.
Bolsonaro insistió en que las elecciones de 2022 “no serán confiables” y reiteró su tesis de que el propio TSE podría favorecer un “fraude” para volver a llevar al poder “a un ladrón”, en clara alusión a Luiz Inácio Lula da Silva, favorito en todos los sondeos.
“Hoy tenemos señales de (que será) una elección en la que no se confiará en el resultado del conteo”, subrayó Bolsonaro.
Pasar la página.
La oposición al Gobierno, tanto en la izquierda como en la derecha más moderada, consideraron que la decisión de la Cámara de Diputados le pone fin a la cruzada de Bolsonaro por el voto impreso y deberá reducir la tensión institucional que el mandatario generó con su campaña de descrédito contra el sistema electoral.
El TSE abrió un proceso administrativo contra Bolsonaro, que además será investigado en el Supremo Tribunal Federal (STF) por “ataques a la democracia” y difusión de noticias falsas.
El vicepresidente Hamilton Mourao, distanciado de Bolsonaro, dijo ayer miércoles que “el Congreso decidió y está decidido”, por lo que confía en que “el asunto se haya acabado”.
Mourao también comentó un “inusual” desfile militar que Bolsonaro encabezó frente al Congreso poco antes de la votación, que para la oposición fue un claro intento de “intimidar” a los diputados. “Si era eso, fue extremadamente ridículo”, declaró.
El martes, junto a los comandantes del Ejército, la Marina, la Aeronática y algunos ministros, Bolsonaro observó el convoy de vehículos militares desde lo alto de la rampa del Palacio de Planalto, con vista al Congreso y el STF.
El desfile fue organizado para que integrantes de las Fuerzas Armadas le entregaran la invitación a un ejercicio militar que ocurre anualmente desde 1988 a unos 80 km de Brasilia.
Pero fuera de cualquier fecha patria, el desfile de los blindados y otros vehículos militares por la región central de Brasilia, es apuntado por observadores como algo inédito desde la vuelta a la democracia en Brasil en 1985 y como un gesto de fuerza de Bolsonaro, cada vez más cercado por investigaciones judiciales y con su popularidad en declive.
El presidente de la Cámara Baja, Arthur Lira, alienado a Bolsonaro pero que dio por “cerrado” el debate sobre el voto electrónico, sostuvo que “es hora de volver a la normalidad”, pues “las cuerdas se han tensado demasiado”.
Sin embargo, hay quienes creen que el conflicto puede continuar y prolongarse incluso hasta las elecciones de octubre de 2022. Eso sugirió Otávio Rego Barros, exportavoz de Bolsonaro y hoy enemistado con el gobernante. En un artículo publicado en el diario O Globo, aunque sin citar explícitamente a Bolsonaro, Barros alertó sobre un “abismo que se agranda” con la “erosión de la racionalidad” y una “degradación potenciada por la desmedida ambición de poder” de los “insensatos incorregibles”.
“Bolsonaro seguirá insistiendo en la misma tecla. Es lo que sabe hacer: agitar, movilizar (a sus partidarios), causar tumulto”, sostiene el analista Sylvio Costa, de Congresso em Foco. (Con información de AFP y EFE)
Diputada destituida por matar a su marido
La Cámara Baja de Brasil destituyó a la diputada y pastora evangélica Flordelis dos Santos de Souza, acusada de haber mandado a matar a su marido en complicidad con algunos de sus hijos. La destitución fue aprobada con 437 votos a favor y apenas 7 en contra. Anderson do Carmo, su marido y también pastor, fue asesinado con 30 balazos en la puerta de la casa en Río de Janeiro el 16 de junio de 2019. Flordelis tenía disputas financieras con su marido. En la planificación del asesinato participaron siete de los 55 hijos (51 de ellos adoptados) que tiene la pastora, fundadora de la Comunidad Evangélica Ciudad del Fuego.