El presidente de Brasil, Jair Bolsonaro, se pronunció por primera vez tras su derrota en las urnas este domingo, ante Luiz Inácio Lula da Silva.

Sin aludir a la victoria de su contrincante, el mandatario aseguró en un breve discurso que "seguirá siendo fiel a la Constitución".

También afirmó que los bloqueos de camioneros en varias carreteras del país son fruto de la "indignación" y del "sentimiento de injusticia" por su derrota en las elecciones presidenciales.

El actual presidente "autorizó" el inicio del "proceso de transición" con el equipo de Lula, añadió por su parte el jefe de gabinete de Bolsonaro, Ciro Nogueira.

Bolsonaro perdió las elecciones por una diferencia de 1,8 puntos frente a Luiz Inácio Lula da Silva, y hasta ahora, 45 horas después de confirmados los resultados, aún no se había pronunciado ni se le había visto en público desde la mañana del domingo, cuando votó en Río de Janeiro.

El vicepresidente electo de Brasil, Geraldo Alckmin, coordinará la transición para el futuro gobierno de Lula con la administración saliente, anunció este martes la presidenta del Partido de los Trabajadores (PT).

El exgobernador de Sao Paulo, antiguo opositor y actual compañero de fórmula del líder izquierdista, "tiene más que legitimidad, poder político e institucional para conducir" el proceso, dijo Gleisi Hoffmann, presidenta del PT, quien hizo el anuncio tras reunirse con Lula en Sao Paulo.

La intención del equipo de Lula es que el proceso se inicie "desde el jueves", agregó.

Alckmin mantuvo el lunes el primer contacto de alto nivel con la administración de Jair Bolsonaro, con una comunicación telefónica con el actual vicepresidente Hamilton Mourao.

"Mourao le mandó un mensaje de WhatsApp" para ponerse a disposición y Alckmin "lo llamó para agradecérselo", confirmó un portavoz del exgobernador a la AFP.

Con información de EFE y AFP