PRESIDENTE DE EE.UU. MARCA LA AGENDA
En debate si Estados Unidos puede ser mediador en Medio Oriente.
Estados Unidos y el secretario general de la ONU, Antonio Guterres, se enfrentaron ayer en un cruce de declaraciones en torno al futuro del proceso de paz en Medio Oriente, luego de la decisión del presidente Donald Trump de reconocer a Jerusalén como capital de Israel, que desencadenó incidentes en la región en medio de llamados a una "intifada" por parte de los palestinos.
La nueva crisis en Medio Oriente está entre las prioridades que tienen por estos días sobre la mesa los líderes europeos. Ayer domingo, el presidente francés, Emmanuel Macron, le dijo al primer ministro israelí, Benjamin Netanyahu, que muestre algunos gestos a los palestinos para romper el impasse en el que estaban inmersas ambas partes.
Netanyahu está en París para una reunión con los ministros de Relaciones Exteriores de la UE que se realizará hoy lunes, en la que intentarán presentar un frente unificado tras la decisión de Trump de reconocer a Jerusalén como la capital de Israel.
Macron señaló que le dijo a Netanyahu que está en contra de la decisión de Trump, porque es una "amenaza peligrosa para la paz".
De todos modos, Macron consideró que el reconocimiento por Estados Unidos de Jerusalén como capital de Israel no le invalida para la mediación que prepara, que hay que darle tiempo para formularla y, sobre todo, ver cuál será la reacción de las partes, que es de quien todo depende.
Precisamente la viabilidad de Estados Unidos como mediador entre israelíes y palestinos enfrentó ayer al gobierno de Trump con el secretario general de la ONU. La decisión de Trump de reconocer a Jerusalén como capital de Israel perjudicará el proceso de paz en Medio Oriente, dijo el secretario general Antonio Guterres.
Su posición contrasta nítidamente con la de la embajadora de Estados Unidos ante la ONU, Nikky Haley, quien sostuvo que la resolución de Trump "hará avanzar" el proceso de paz entre israelíes y palestinos.
Hablando para la cadena CNN, Guterres manifestó su satisfacción por el hecho de que el yerno y asesor de Trump, Jared Kushner, se haya reunido recientemente con israelíes y palestinos sobre un nuevo plan de paz después de años de estancamiento en el proceso de paz.
"No estoy diciendo que ello vaya a suceder, pero había una esperanza de que sería posible por fin poner fin a este horrible conflicto entre Israel y los palestinos", dijo Guterres. "Creo que la decisión tomada el miércoles puede poner en peligro esos esfuerzos", agregó el secretario general de las Naciones Unidas en alusión a la decisión de reconocer a Jerusalén como capital de Israel.
Pero Nikki Haley considera que los temores por esa decisión son exagerados. En su opinión, Trump es el primer mandatario estadounidense que ha tenido el "valor" de aplicar la ley que adoptó el Congreso en 1995, pero que ha sido prorrogada sistemáticamente por todos los presidentes. "Sobre la gente molesta, sabíamos que ocurriría esto. Se debe a un acto de arrojo. (Pero) creo firmemente que esto hará avanzar el proceso de paz", declaró en una entrevista a la cadena CNN.
La misma posición tiene Netanyahu, quien ayer afirmó que el giro de Estados Unidos al reconocer a Jerusalén como capital de Israel es simplemente asentar una realidad de hecho, y si los palestinos lo asumieran se avanzaría en el proceso de paz. "Es nuestra capital y nunca ha sido la capital de otro pueblo", subrayó Netanyahu en París al comparecer ante la prensa junto a Macron, al término de un encuentro de más de dos horas y media en el Palacio del Elíseo. Según su razonamiento, cuando los palestinos acepten esa "realidad" que deriva de la historia de los judíos y del hecho de que Israel la hizo su capital desde la creación del Estado hace siete décadas, "podremos avanzar en el camino de la paz".
Protestas.
En tanto, decenas de miles de manifestantes salieron de nuevo a la calle ayer domingo, por cuarto día consecutivo, en Oriente Medio y en otras partes del mundo, para protestar por la decisión de Trump de reconocer a Jerusalén como capital de Israel.
El papa Francisco volvió a llamar ayer domingo a la "sensatez" y la "prudencia de todos" para "evitar una nueva espiral de violencia".
Una manifestación masiva tuvo lugar de nuevo en Estambul, donde la semana próxima se celebrará una cumbre de la Organización de Cooperación Islámica (OCI). El sábado, el Fatah del presidente palestino Mahmud Abas pidió a los palestinos "continuar la confrontación y aumentarla".