EFE
Ucrania se ha afianzado en las posiciones recuperadas en el sur para avanzar hacia la costa del mar de Azov, mientras las fuerzas rusas intentan ampliar sus conquistas en el este, donde un bombardeo ruso dejó en la noche del lunes al menos siete muertos y más de 80 heridos.
“El enemigo realizó intentos fallidos de recuperar posiciones perdidas” en la región meridional de Zaporiyia, señala el último parte del Estado Mayor del Ejército ucraniano.
Mientras, las fuerzas ucranianas continuaron “las acciones ofensivas en los frentes de Melitópol y Berdiansk”, donde se atrincheraron en las posiciones conquistadas, agrega.
La información sobre los paulatinos avances ucranianos en el sur también fue destacada en el último informe del Instituto para el Estudio de la Guerra (ISW), quien indica que las fuerzas de Kiev continuaron sus contraataques en al menos dos sectores del frente.
Simultáneamente, las tropas rusas y ucranianas continúan los combates en el este, donde dos misiles rusos impactaron en la noche del lunes contra un edificio residencial en Pokrovsk, región de Donetsk.
El bombardeo, según fuentes oficiales de Kiev, dejó al menos 7 muertos y más de 80 heridos.
El presidente de Ucrania, Volodímir Zelenski, denunció que Rusia “trata de dejar Donetsk convertido en ruinas y piedras calcinadas”. “Es necesario detener el terror ruso. Todos los que luchan por la libertad de Ucrania salvan vidas humanas. Todos los que en el mundo ayudan a Ucrania, vencerán junto a nosotros a los terroristas. Rusia responderá por todo lo que ha hecho en esta horrible guerra”, afirmó en Telegram.
Según las autoridades regionales, los ataques rusos se han cobrado la vida de 1.645 residentes de Donestk y han herido a 3.939 desde que comenzó la guerra.
Moscú, por su parte, informó de que había atacado un puesto de mando del Ejército ucraniano junto a la ciudad de Pokrovsk.
Además, el parte de guerra ruso hablaba ayer de la situación en el frente de Kupiansk (región de Járkov), donde las tropas rusas ocuparon “posiciones más ventajosas”.
En un intento de apoyar la contraofensiva ucraniana, que ya supera los dos meses, Estados Unidos aprobó el primer lote de tanques Abrams prometidos a Kiev.
Este anuncio se produce después de que el envío de los blindados fuera aprobado oficialmente a principios de agosto, aunque el visto bueno a sus suministros se produjo en enero pasado, tras meses de titubeo y forcejeo diplomático.
“Tienen que llegar a Europa y luego a Ucrania, junto con todas las cosas que van con ellos”, señaló Doug Bush, subsecretario para Adquisiciones, Logística y Tecnología del Ejército de Estados Unidos.
Precisó que se refiere a “municiones, piezas de repuesto, equipos de combustible, instalaciones de reparación”, porque “no se trata sólo de los tanques, sino de todo lo que los acompaña”.
Actualmente, en los campos de batalla en Ucrania operan los Leopard alemanes y los Challenger británicos, aparte de distintas versiones de los tanques soviéticos, que usan ambos bandos.
Fórmula de paz
Paralelamente, la Oficina del Presidente ucraniano publicó la detallada Fórmula de Paz de Zelenski, que consta de 10 puntos y fue discutida durante el fin de semana en Yeda, Arabia Saudí.
“La soberanía y la integridad territorial de Ucrania es la base de la fórmula”, escribió el jefe del gabinete de Zelenski, Andrí Yermak.