Madeleine McCann desapareció hace casi 16 años, el 3 de mayo de 2007, durante unas vacaciones familiares en Portugal. La angustia de los padres de la pequeña, que en aquel momento tenía cuatro años, los persigue desde entonces. Hace unas semanas atrás, una pequeña esperanza iluminó al mundo en este caso: una joven, Julia Faustyna, aportó indicios de que su identidad podría tratarse de la niña británica, pero una prueba de ADN descartó la posibilidad en los últimos días. En tanto, Kate y Gerry fueron contundentes con el resultado: “No hay nada que informar”.
Julia Faustyna, una joven polaca de 21 años, se hizo viral luego de compartir su teoría de que su identidad podría ser la de Madeleine McCann. Un sinfín de fotografías suyas junto a las de la pequeña desaparecida a modo de comparaciones físicas inundaron su perfil de Instagram, con la intención de aportar pruebas que consolidaran su hipótesis de que fue engañada desde su infancia. Además, para justificar su edad, ya que Madeleine tendría hoy 19 años, la joven alegó que sus padres le mintieron y que falsificaron los documentos de su nacimiento.
El lunes pasado, una prueba de ADN verificó que Faustyna no comparte genética con Kate y Gerry McCann. Tras la insistencia de la joven, la prueba indicó que Julia es 100% polaca, con un pequeño porcentaje de orígenes de Lituania y Rusia. Los padres de Madeleine, que hasta entonces decidieron no pronunciarse ante el caso, fueron contundentes ante la situación. “No hay nada que informar en este momento”, señaló un portavoz de ambos, según consignó el medio estadounidense New York Post. Y agregó: “Si lo hay, vendrá de la Policía Metropolitana”.
“Podría ser otra niña secuestrada”
El resultado de la prueba de ADN fue confirmado por la médium Fia Johansson, quien acompañó en su teoría a Faustyna y con quien vivió en Estados Unidos durante todo el proceso. Ante el veredicto, la joven decidió regresar a la casa de su familia en Polonia. En tanto, su representante alegó previamente que “podría ser otra niña secuestrada” y que “hay evidencias” de que “algo muy grave sucedió en la infancia” de Julia.
“Para nosotros, como familia, es obvio que Julia es nuestra hija, nieta, hermana, sobrina y prima. Tenemos recuerdos, tenemos fotos”, apuntaron los padres de la joven polaca. Y agregaron: “Julia también tiene estas fotos, porque las tomó de la casa familiar con el acta de nacimiento, así como numerosas altas hospitalarias”.
La cuenta de Instagram de iammadeleinemccann, donde Julia compartió las presuntas evidencias de su parecido, llegó a superar el millón de seguidores, pero su popularidad descendió luego de que la joven reconociera que tenía dudas de que su identidad fuera la misma que la de la pequeña británica y ahora acumula menos de 67 mil. Aun así, el tema de la desaparición de Madeleine volvió a ponerse en agenda 16 años después y las autoridades de Reino Unido y Portugal continúan investigando su desaparición.
La Nación (GDA)