AFP, EFE
La Corte Suprema israelí dictaminó ayer martes que los estudiantes ultraortodoxos de las escuelas talmúdicas, hasta ahora exentos de obligaciones militares, deben ser enrolados en el ejército, un revés para el gobierno deBenjamin Netanyahu.
El tribunal se pronunció sobre este tema sensible cuando el ejército israelí está en guerra con la organización terrorista palestina Hamás en Gaza desde hace más de ocho meses y otro conflicto en marcha en la frontera del Líbano con el grupo chiita Hezbolá.
“A falta de un marco legal adecuado, el poder ejecutivo no tiene potestad para ordenar no aplicar la Ley sobre el Servicio Militar a los estudiantes de las escuelas talmúdicas”, estableció el alto tribunal, y añadió que “el Estado debe actuar para aplicar la ley”.
El servicio militar es obligatorio en Israel para hombres y mujeres, pero los judíos ultraortodoxos pueden evitarlo si se dedican al estudio de los textos sagrados, en virtud de una exención instaurada por David Ben Gurion, fundador del Estado de Israel, en 1948, para preservar tradiciones que estuvieron en riesgo de perderse debido al Holocausto.
La decisión de la Corte Suprema llega después de que el Parlamento israelí postergara un proyecto de ley con vistas a un enrolamiento progresivo de los ultraortodoxos. Algunos detractores consideran que el texto debatido por el Parlamento, apoyado por Netanyahu, pero criticado por el ministro de Defensa Yoav Gallant, está lejos de responder a las necesidades de efectivos del ejército israelí.
La Corte se pronunció de forma unánime en respuesta a varios recursos interpuestos por grupos de la sociedad civil que piden que el servicio militar sea obligatorio para los hombres ultraortodoxos.
“En este momento, en plena mitad de una guerra difícil, la desigualdad de la carga es más marcada que nunca y requiere la aplicación de una solución duradera”, argumentó la Corte Suprema.
Los magistrados ordenaron que el Estado cese el financiamiento de las escuelas religiosas cuyos estudiantes eludan el servicio militar.
Netanyahu gobierna gracias una alianza con partidos ultraortodoxos, muchos de ellos opuestos al reclutamiento, y su gobierno está divido sobre la cuestión.
El partido de Netanyahu, el Likud, afirmó en un comunicado que la solución a la cuestión del reclutamiento de los ultraortodoxos es la ley que está siendo tramitada en el Parlamento.
El jefe del partido ultraortodoxo Judaísmo Unificado de la Torá, Yitzhak Goldknopf, ministro de Vivienda, criticó una decisión “muy desafortunada y decepcionante”.
El líder de la oposición, Yair Lapid, celebró la decisión de la Corte e instó al Ministerio de Defensa “hacer que se cumpla la ley”.
Los ultraortodoxos constituyen cerca del 13% de la población de Israel.
3.000 inmediatos
La fiscal general de Israel, Gali Baharav-Miara, ordenó ayer martes a la cúpula militar que reclute “inmediatamente” a 3.000 judíos ultraortodoxos, tras la decisión de la Cortt israelí de poner fin a su exención del servicio obligatorio.
En una carta al asesor legal del Ejército, recogida por la prensa israelí, la oficina de Baharav-Miara explica que las autoridades deben actuar de forma inmediata para implementar la decisión de la Justicia.
La carta, dirigida también a los Ministerios de Finanzas y Educación, recuerda que la decisión de la Corte Suprema impide transferir fondos a las escuelas talmúdicas (yeshivot) cuyos estudiantes no realicen el servicio militar obligatorio.
Se estima que hay unos 63.000 jóvenes ultraortodoxos (haredim) en edad militar que estarían obligados a servir en el Ejército tras la nueva orden de la Corte Suprema de Justicia, aunque las fuerzas armadas israelíes ya han avisado de que para el año 2024 solo podrían reclutar a 3.000.
Esto es porque los judíos ultraortodoxos tienen requisitos especiales en áreas como la dieta o la convivencia con mujeres, y el Ejército tendría que acomodar a los nuevos reclutas en batallones especiales.
Netanyahu arenga: “hasta la victoria”
El primer ministro Benjamín Netanyahu visitó ayer martes a los reservistas apostados en el norte de Israel, donde el Ejército mantiene un intercambio de fuego constante con la milicia chií libanesa Hezbolá.
“Confío en ustedes y el pueblo de Israel confía en ustedes”, arengó Netanyahu a las tropas. “Con la ayuda de Dios y con la ayuda de nuestros combatientes lograremos todos nuestros objetivos, hasta la victoria”, escribió Netanyahu en la red social X después del encuentro en el norte, cuya ubicación no especificó el comunicado castrense. El Ejército israelí protagoniza junto a Hezbolá una escalada de violencia en la frontera con el Líbano que hace temer una guerra abierta.
Ayer los sistemas de defensa aérea israelies interceptaron dos “objetivos aéreos sospechosos” -habitualmente cohetes o drones- que cruzaron desde el Líbano al territorio de Israel.
Antes, aviones de combate israelíes atacaron infraestructuras militares de Hezbolá, así como otras infraestructuras terroristas en las áreas de Khiam y Odaisseh, al sur del Líbano.