Cuba confirmó ayer que en los comicios del domingo se registró la participación más baja en elecciones parlamentarias desde la entrada en el poder de la revolución en 1959.
En conferencia de prensa, Alina Balseiro, presidenta del Consejo Electoral Nacional (CEN) informó que en la jornada del domingo participó el 75,92% de los más de 8,1 millones de cubanos llamados a las urnas.
Esta tasa de participación es casi 10 puntos porcentuales menor a la de las parlamentarias de 2018, proceso que renovó al Parlamento que eligió al presidente, Miguel Díaz-Canel.
La cifra se aleja considerablemente de la media histórica antes de 2018, por encima del 90%. Sin embargo, la participación fue mayor que en las dos citas con las urnas previas, el referendo del Código de las Familias de septiembre y las municipales de noviembre.
Balseiro agregó que el 90,28% de los sufragios fue válido en las parlamentarias, 6,22% de las boletas estuvieron en blanco y 3,50% fueron anuladas. Además, seña- ló que los 470 candidatos -para 470 asientos, en su inmensa mayoría del Partido Comunista o de organizaciones afines- lograron superar el umbral del 50% de los votos.
Tras la jornada del domingo, tres ONG de observación electoral independiente (en Cuba no hubo observadores internacionales) calificaron los comicios como los “más irregulares” en el país desde 1976 y consideraron que no se atendió a la “voluntad” del electorado.
Con información de EFE