Agencias EFE y AFP
En la inestable e imprevisible Venezuela, al menos ahora hay una fecha para las elecciones presidenciales, aunque hasta ayer no estaba claro si iban a ser libres y transparentes como reclama la comunidad internacional, o con candidatos proscritos y opositores presos o exiliados como los mantiene la dictadura de Nicolás Maduro.
Las esperadas elecciones presidenciales en Venezuela se harán el 28 de julio, fecha del natalicio de Hugo Chávez.
El presidente Maduro aparece como aspirante natural del régimen para la reelección por seis años, aunque aún no confirma su candidatura, mientras que la oposición está en los hechos sin candidato, pues María Corina Machado, elegida en las primarias de octubre, está inhabilitada por 15 años.
El Consejo Nacional Electoral (CNE), de línea oficialista, aprobó por “unanimidad” la fecha de 28 de julio, poco más de cinco meses antes de la toma de posesión, el 10 de enero de 2025, anunció su presidente Elvis Amoroso, excontralor responsable de inhabilitaciones de opositores y sancionado por Estados Unidos en 2017 y la Unión Europea en 2020.
La semana pasada, el CNE recibió del Parlamento, controlado por el régimen, un documento con 27 propuestas de fecha para las presidenciales.
El plazo para inscribir candidaturas se fijó entre el 21 y el 25 de marzo y la campaña electoral arranca el 4 de julio para extenderse hasta el 25 de ese mes.
Los partidos tienen entre el 21 y 25 de marzo para presentar a los candidatos.
La fecha entra dentro del lapso de segundo semestre acordado por representantes del régimen y la oposición. El pacto contempla la presencia de una misión de observación técnica de la Unión Europea, así como de otros actores internacionales. Amoroso no se pronunció sobre ello ayer.
Maduro, que gobierna desde 2013 tras ser ungido por Hugo Chávez antes de su muerte, dijo a principios de año que era “prematuro” confirmar si buscaría un tercer mandato, aunque importantes dirigentes del régimen ya lo dan como candidato del Partido Socialista de Venezuela (PSUV). Su reelección en 2018 fue tachada de fraudulenta por la oposición, que boicoteó el proceso, y Estados Unidos, que le impuso al régimen una batería de sanciones. La UE también desconoció el resultado.
Machado en veremos
La líder opositora María Corina Machado se mantiene activa en actos políticos pese a su inhabilitación ratificada en enero por la corte suprema, que como todos los organismos públicos en Venezuela son afines al régimen de Maduro.
La semana pasada recorrió regiones del oriente del país y este martes estuvo en Barinas, estado natal de Chávez, conquistado por la oposición en las elecciones de gobernadores de 2021 en un proceso plagado de obstáculos por parte de las autoridades.
Machado arrasó en octubre pasado en las elecciones internas de la alianza opositora Plataforma Unitaria con más de 2 millones de votos (92% del total).
El partido opositor Voluntad Popular (VP) aseguró este lunes que Machado podrá participar y ganará. “Que no quepa duda que vamos a ganar y que lo vamos a lograr con María Corina Machado al frente”, expresó en X el partido liderado por Leopoldo López.