Redacción El País
El presidente mexicano, Andrés Manuel López Obrador, expresó ayer lunes que “no aceptará” que los políticos “deshonestos” de Estados Unidos usen a México como “piñata” por problemas como el tráfico de fentanilo y la migración.

El mandatario atribuyó la crisis del consumo de fentanilo en Estados Unidos a los valores de ese país, donde, según él, los jóvenes afrontan problemas porque sus padres los echan de la casa apenas cumplen la mayoría de edad.

“Eso, con todo respeto, en nuestro país no sucede, aquí lo que se dice es: échale más agua a los frijoles. Entonces por eso no es fácil enfrentar el problema del fentanilo (en Estados Unidos) y por esto, también, no vamos a aceptar que México sea piñata de estos políticos deshonestos”, declaró en su conferencia matutina.

La presión por el tráfico de fentanilo se ha elevado este año, cuando coinciden las elecciones presidenciales de México, en junio, y de Estados Unidos, en noviembre. El presidente Joe Biden prometió este fin de semana cerrar la frontera con México, si hay un exceso en el flujo migratorio, mientras que el exmandatario Donald Trump ha avisado que la “sellará” y que mandará tropas para combatir los cárteles mexicanos.

López Obrador, quien momentos antes llamó “demagógica” la propuesta de cerrar la frontera, denunció la “politiquería” en Estados Unidos.

“Esa politiquería que confunde, desde luego con (los mensajes de) los medios de información: ‘Nos invaden los migrantes, todos los migrantes traen drogas, los migrantes son violadores, rateros’. Todos los medios (lo dicen), y no es así”, manifestó.

El mandatario argumentó que en México no existe un problema en el consumo de fentanilo como en Estados Unidos. “Cuando hablamos de 100.000 muertos jóvenes (en EE.UU.), que duele muchísimo, por fentanilo, si vemos esos datos con lo que pasa en México, aquí debemos tener por sobredosis 1.000, cuando mucho”, comparó. (EFE)