Los médicos de la provincia de Buenos Aires informaron que, "por razones de conciencia", se negarán a asistir a secuestradores y delincuentes responsables de crímenes aberrantes. La medida fue calificada como "discriminatoria y antiética" por la Secretaría de Derechos Humanos de la provincia. Además, el ministro de Salud provincial, Ismael Passaglia, advirtió que "los médicos no pueden negarse a atender a delincuentes por razones de conciencia".
El presidente del Colegio de Médicos de la provincia de Buenos Aires, Mauricio Eskinazi, explicó: "Cada vez más profesionales se niegan a asistir a delincuentes porque muchos de ellos han sido víctimas de delitos".
Esta negativa no comprende a criminales en situación de emergencia, ni la atención a los presos detenidos en cárceles de la provincia, pero sí alcanza, según explicó Eskinazi, a los detenidos en comisarías que son trasladados a hospitales públicos para recibir tratamientos de rutina.
"Sin violar el juramento hipocrático y argumentando razones de conciencia los médicos de la provincia pueden negarse —como ya ha ocurrido—, a atender a determinado tipo de delincuentes, siempre que éstos puedan ser asistidos por otro profesional", informó el presidente del Colegio de Médicos.
El juramento hipocrático es una tradición, un compromiso en el que todo médico recibido jura aplicar su conocimiento en bien de los enfermos, según su saber y "nunca para mal de nadie".
El Instituto Nacional contra la Discriminación, la Xenofobia y el Racismo (Inadi) calificó la medida adoptada por el Colegio de Médicos como "contraria a este juramento, profundamente antisocial y violatoria de los principios éticos".
"Los médicos no pueden negar la atención a nadie por un motivo que implique cualquier causal de discriminación", dijo el titular del Inadi, Enrique Oteiza.
"PRESERVAR LA VIDA". El secretario de Derechos Humanos de la provincia de Buenos Aires, Remo Carlotto, también fustigó la negativa a brindar atención: "Se debe preservar la vida, aun de aquellos que han delinquido. Cualquier acto discriminatorio provocará más vulneración y más violencia".
El secretario general de la Asociación Sindical de Profesionales de la Salud de la provincia de Buenos Aires, Miguel Lezcano, explicó: "Nosotros recibimos dos tipos de pacientes. Unos, derivados por orden judicial, detenidos en cárceles y comisarías; y otros, pacientes que los trae la propia policía, porque el servicio sanitario de esta dependencia no alcanza. En estas situaciones nos advierten sobre su peligrosidad".
"En general, hay mucho temor. Hemos expresado reparos por razones de seguridad", agregó.
E, inmediatamente, aclaró: "Una negativa por razones de conciencia me parece una barbaridad. A nosotros nos corresponde atender sobre su dolencia, no sobre su conducta. Yo no comparto esta medida", dijo.
El reciente secuestro de Nicolás Garnil, hijo de un médico de San Isidro, derivó en la condena y el rechazo públicos del Colegio de Médicos, que reúne a 40.000 profesionales en esta provincia.
El Colegio de Médicos dio a conocer su "solidaridad y apoyo" al médico Carlos Garnil, padre de Nicolás, secuestrado desde el domingo 25 del mes pasado. El presidente del Colegio de Médicos aseguró que esta situación "afecta a toda la comunidad de profesionales de la medicina" y ofreció a Garnil "todo el respaldo moral y efectivo" de la entidad que conduce.
"El actual índice de inseguridad ha provocado alerta y reacciones de algunos médicos que sienten su dignidad avasallada... Muchos de ellos han sido víctimas de robos, agresiones físicas o lesiones", argumentó Eskinazi.
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