BRASIL
La última encuesta da cuatro puntos de diferencia para el domingo 30.
"Muy pareja, muy disputada”. Así reaccionó ayer juevesLuiz Inácio Lula da Silva a la última encuesta de intención de voto que lo ubica solo cuatro puntos arriba de Jair Bolsonaro para el balotaje del domingo 30.
Ante este panorama, Lula pidió a su militancia convencer a los indecisos frente a las “monstruosidades que vende” Bolsonaro.
En una rueda de prensa en Río de Janeiro, el candidato del Partido de los Trabajadores (PT) dijo estar “seguro” de que ganará la segunda vuelta presidencial del 30 de octubre, pero alertó que Bolsonaro“ha ganado algunos puntos muy lentamente” en las últimas encuestas.
Un sondeo publicado el miércoles por el instituto Datafolha otorgó a Lula el 49% de los apoyos y a Bolsonaro, candidato del Partido Liberal (PL), el 45%, lo que supone la menor diferencia en lo que va de la campaña y un empate técnico dentro del margen de error.
“La elección está muy pareja, muy disputada, hay mucha gente definida y cada vez es más bajo el número de personas a las que convencer”, manifestó el expresidente, que busca un tercer mandato después de gobernar el país entre 2003 y 2010.
Lula ganó la primera vuelta de las elecciones del 2 de octubre con un 48,4% de los votos, frente al 43,2% que tuvo Bolsonaro, que aspira a la reelección.
No obstante, aseguró que ve “imposible” una “remontada” de su adversario en la última semana de campaña, a pesar del “torrente de dinero público” que está repartiendo en vísperas de los comicios, por medio de la “liberación de fondos de garantía” o el adelantamiento del pago de subsidios sociales.
Asimismo, volvió a denunciar “la máquina poderosa de contar mentiras” que, según él, Bolsonaro “utiliza para vender monstruosidades” en su contra.
“El tipo es un mentiroso muy profesional, miente con la mayor desfachatez en televisión”, criticó Lula, para garantizar después que no dejarán llevarse por el “juego rastrero” de la campaña bolsonarista.
Ayer Lula también se refirió a Venezuela. El gobierno de Bolsonaro no reconoce al régimen de Nicolás Maduro, y expresó su apoyo al líder opositor Juan Guaidó. En caso de que gane Lula, la política de Brasil hacia Venezuela cambiará.
Lula afirmó ayer jueves que Guaidó “ya no es nada” en Venezuela. “Es increíble que la embajadora de Venezuela” en Brasil “sea la embajadora designada por Guaidó”, María Teresa Belandria, que “no representa a Venezuela, ni a Guaidó, que ya no es nada en Venezuela”, señaló Lula en la rueda de prensa en un hotel de Río de Janeiro.
Bolsonaro irónico
Por su parte, el presidente brasileño ironizó sobre los compromisos que Lula tuvo que asumir ante los evangélicos para intentar atraer sus votos, mayoritariamente favorables a Bolsonaro.
El jefe de Estado afirmó en un mensaje en sus redes sociales que al parecer también se ganó el voto del expresidente. “Lula ahora dice que es contrario al aborto, las drogas y la ideología de género. Conseguimos cambiar otro voto (a favor de Bolsonaro)”, afirmó al referirse a la Carta a los Evangélicos divulgada este miércoles por el candidato del PT.
“Con un poco más de tiempo él (Lula) va a pulsar 22 (el número de Bolsonaro en las urnas electrónicas) por la libertad de la Nación. La izquierda vive de hablar mal de nuestras banderas, pero en época de elecciones se apasiona por ellas”, agregó el jefe de Estado.
En el documento que presentó este miércoles tras una reunión con líderes evangélicos, Lula se comprometió, en caso de ganar las elecciones, a mantener la libertad de culto y de religión, a reforzar el papel de la familia y a no interferir políticamente en el uso de la fe.
Declarado católico, Lula también manifestó su “respeto y admiración” por la fe de los evangélicos e insistió en la importancia de la familia, una de las principales banderas de Bolsonaro, férreo defensor de los valores cristianos y la agenda conservadora.
Igualmente se dijo contrario al aborto, pero recordó que su legislación le compete al Congreso, pese a que hace algunos meses defendió la interrupción del embarazo en los casos ya previstos por la ley, como violación o riesgo para la vida de la madre.
Con tales compromisos, Lula aspira al voto de los evangélicos, que representan a cerca de la cuarta parte de los electores brasileños.
De acuerdo con los últimos sondeos de intención de voto, Bolsonaro cuenta con el respaldo de cerca del 65% de los evangélicos, más que el doble que Lula (31%).
Bolsonaro tiene más apoyos entre los futbolistas brasileños
Los pocos futbolistas que se posicionan en la contienda presidencial de Brasil lo hacen por Jair Bolsonaro, con el astro Neymar a la cabeza. Al respaldo del 10 del Paris Saint Germain se suman Felipe Melo (Fluminense) o Lucas Moura (Tottenham), y viejas figuras del ‘scratch’ como Rivaldo, Romario, Marcos o Robinho. Según el historiador Joao Malaia, profesor de la Universidad Federal de Santa Maria, en Rio Grande do Sul, el mensaje bolsonarista cala más en los deportistas, muchos de los cuales se convierten rápidamente en millonarios a pesar de sus orígenes humildes. El discurso del presidente “está muy basado en el éxito individual, en la capacidad que cada uno tiene para superar todas las dificultades. La trayectoria de un futbolista es un ejemplo de eso”, agrega.
Por Lula apenas se decantó públicamente Paulinho, del Bayer Leverkusen, y exfutbolistas como Raí, Walter Casagrande y Juninho Pernambucano y del exseleccionador Vanderlei Luxemburgo. Para Joao Malaia, la falta de respaldos hacia Lula puede explicarse en los escándalos de corrupción durante su gobierno. “En Brasil impera una máxima: el fútbol y la política no se mezclan. Quien intenta luchar contra eso termina sufriendo muchas represalias, principalmente en el medio deportivo”, explica.