Redacción El País
El presidente de Brasil, Luiz Inácio Lula da Silva, viajó ayer a Egipto, en el marco de una gira que también lo llevará a Etiopía, donde asistirá a la cumbre de la Unión Africana con un mensaje en defensa de la paz en Oriente Medio y una nueva multipolaridad global. Lula, uno de los máximos exponentes de la izquierda latinoamericana, hará escala en Cabo Verde antes de aterrizar en El Cairo, donde hoy miércoles, en visita oficial, se reunirá con el presidente de Egipto, Abdelfatah al Sisi, y otras autoridades.

Ambos mandatarios abordarán asuntos de la agenda bilateral, en materia de comercio, inversiones y cooperación en defensa; y global, como la crisis climática, la “reforma de los organismos internacionales y el conflicto entre Israel y Palestina”, según informó el Gobierno brasileño en una nota.

Lula ha ido subiendo el tono de sus declaraciones para condenar la ofensiva de Israel en la Franja de Gaza, donde en los últimos cuatro meses se han reportado cerca de 30.000 muertos y 70.000 heridos, dentro de la guerra entre el Estado hebreo y la organización terrorista Hamás, según el Ministerio de Salud del grupo palestino.

En diversas declaraciones públicas, el presidente brasileño ha insistido en que “no es humanamente posible aceptar” la muerte “de tantas mujeres y tantos niños” y “la destrucción de todo el patrimonio que construyó el pueblo palestino”, y apoyado la solución de los dos Estados.

En el marco de esa visita, que celebra además los 100 años del establecimiento de las relaciones diplomáticas entre los dos países, Brasil y Egipto firmarán además “acuerdos bilaterales en las áreas de bioenergía y ciencia, tecnología e innovación”.

El Gobierno brasileño considera a Egipto un “actor geopolítico fundamental en diversas cuestiones de paz y seguridad” a nivel global y un “importante socio en los foros internacionales”. [EFE]